La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) informó que Puebla cosecha 4 mil 746 hectáreas de tomate verde al año, por lo que es el segundo lugar a nivel nacional, con una producción de 58 mil 222 mil toneladas.
Lo anterior, según datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) al cierre de 2017, el cual detalló que los principales municipios productores son Quecholac, Atlixco, Coatzingo, Coyotepec, Huaquechula, Ixcaquixtla, Palmar de Bravo, Tecamachalco, Tepexi de Rodríguez, Tepeyahualco y Zacapala, por mencionar algunos de los 70 involucrados.
A través de programas y respectivos componentes, la Sagarpa dio incentivos económicos para las diferentes etapas de su producción y un cultivo de riego, en el que participan más de 3 mil poblanos que abastecen mercados de Guerrero, Oaxaca, Tabasco, Ciudad de México y Tamaulipas.
El cultivo de “tomatillo, tomate de milpa o de cáscara”, como también es conocido, tiene un “comportamiento inmejorable” por la cantidad del vegetal que se obtiene por unidad de siembra, para la cual se necesita una temperatura de 18 a 25 grados centígrados.
La superficie destinada a este cultivo en el país es de alrededor de 42 mil 639 hectáreas, distribuidas en 28 entidades, lo cual permitió que en 2017 la hortaliza mexicana se exportara a Estados Unidos, Países Bajos, Alemania, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido, Holanda y Japón, tres países más que en 2012.
El tomate contiene alto contenido en vitamina C, proporciona fósforo, calcio, fierro y sales minerales, además de que la medicina natural mexicana ha utilizado la cáscara y el fruto de esta planta para bajar los niveles de sangre, corregir problemas respiratorios como tosferina y tos, problemas estomacales, tratar dolor de oídos, presión arterial alta, entre otros.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
