A más de cuatro años de que se aplicó el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a los alimentos y bebidas con alto contenido calórico, los fabricantes poblanos admitieron que sacar líneas “light” de sus productos “estrella” o generar reformulaciones no sirvió para contrarrestar sus efectos fiscales.
El presidente del sector alimentos con 58 socios perteneciente a la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) Ernesto Contreras Laureano, refirió que se tenían amplias expectativas, pero “la realidad es que los consumidores continúan comprando los productos tradicionales y tampoco sirvió como medida de salud para reducir los niveles de sobrepeso y obesidad”.
Refirió que desde hace tres años que lanzaron productos bajos en azucares apenas representan en promedio el 4 por ciento de las ventas totales de las empresas y ese porcentaje va a la baja, porque no hubo la aceptación.
Bajo este contexto, dijo que los empresarios analizan mejor sacarlos del mercado, porque la gente prefiere pagar el producto con todo y el incremento del IEPS que se aplicó.
Inversiones mínimas
Las empresas no han tenido inversiones fuertes para aumentar su capacidad de producción en instalaciones a consecuencia del gravamen, pero sí aplican recursos para renovar maquinaria, comentó.
Entre los productos gravados con 8 por ciento en IEPS, destacan: las botanas, productos de confitería, chocolate y productos derivados del cacao, flanes, dulces de frutas, cremas de cacahuate, paletas de hielo, entre otros.
Dijo que las bajas ventas obligaron a replantear las fórmulas de los productos para crear productos “light”, pero la respuesta fue mínima, por lo que desde el año pasado algunos dejaron de hacerlos y otros solo los mantienen como opción en tiendas de autoservicio.
Insistió que la carga impositiva al sector para reducir los niveles de sobrepeso y obesidad en el país y que representan un problema de salud pública, tampoco significaron un plan eficiente, ya que el consumo está igual.