Por la necesidad médicos y la falta de hospitales en Oaxaca, la primera caravana de migrantes centroamericanos cambió repentinamente su ruta hacia Matías Romero, para ir a Veracruz; la PGR advirtió sobre bandas de secuestradores en este estado.
De acuerdo con la organización Pueblos sin Fronteras, que ha acompañado a los migrantes dese su ingreso a México, los migrantes decidieron, en asamblea extraordinaria, encaminarse hacia Veracruz y no hacia la capital oaxaqueña apenas en la madrugada de este jueves.
Y es que, además de la poca atención médica que encontrarían en el camino, sobre todo para niños y ancianos que han enfermado, les cancelaron la mayor parte de los 70 autobuses que les habían prometido para trasladarlos a la Ciudad de México.
Este cambio de ruta causó inconformidad entre algunos migrantes, quienes rechazaron abandonar el albergue de Juchitán, Oaxaca, para emprender la marcha, como lo han hecho día a día desde el 12 octubre.
No obstante, al mediodía de este jueves se reportó la llegada de los primeros migrantes al municipio oaxaqueño de Matías Romero, donde las autoridades dispusieron el Club Deportivo Ejidal “Emiliano Zapata” como albergue y les habrían prohibido pasar al parque municipal.
Por su parte, Javier Pérez Durón, titular de la Unidad de Migrantes de la Procuraduría General de la República (PGR), advirtió que en Chiapas, Veracruz y Tamaulipas pequeñas bandas o personas se dedican a secuestrar centroamericanos para extorsionarlos o pedir dinero a sus familiares a cambio de su liberación.
Editado por Luis Alberto Palacios
