Ante un auditorio semivacío, con la presencia casi exclusiva de funcionarios, la titular del Comité de Participación Ciudadana Anticorrupción, Karen Berlanga Valdez, advirtió que el huachicol, uno de los principales problemas en Puebla, prolifera al “amparo de la corrupción”.
Este viernes, en la presentación de su primer informe de labores, señaló que la corrupción se ha enraizado como uno de los elementos centrales en el debate público de Puebla, pues afecta la confianza en las instituciones públicas y las personas.
Destacó que, según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (Encig) 2017, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el costo total de la corrupción a nivel nacional, en pagos, trámites o solicitudes servicios públicos y otros contactos con autoridades, ascendió a 7 mil 218 millones de pesos, lo que equivale a 2 mil 273 pesos por persona afectada.
Recordó que, en el mismo año, Transparencia Internacional citó a México en el número 135 de 180 países, e incluso se determinó que en los hogares mexicanos se destina el 33 por ciento de su ingreso familiar a actos de este tipo y los pobres son los que pagan mayor porcentaje de su sueldo en sobornos.
Corrupción lastima a la sociedad
Berlanga Valdez aseveró que estas prácticas lastiman a sociedad, así como limita y encarece el acceso a servicios públicos, desvía recursos, impide el ejercicio de derechos fundamentales y vulnera todas las formas básicas de convivencia.
Por lo anterior, el Sistema Estatal Anticorrupción busca promover un sistema claro y eficiente de rendición de cuentas y mejores prácticas gubernamentales, lo que podría ayudar a disminuir el nivel de percepción de la corrupción, a fin de recuperar la confianza de la ciudadanía y mantener la gobernabilidad en la entidad.
Sin embargo, actualmente la Ley del sistema prevé la emisión de recomendaciones y exhortos no vinculantes, de manera que es indispensable legislar en la materia, para que dichas recomendaciones tengan un efecto vinculante o será complicado “atacar de manera efectiva el fenómeno de la corrupción”.