Sindicalizados acusan uso político de Cobaep a favor del PRD y candidatos
Sindicalizados acusan uso político de Cobaep a favor del PRD y candidatos. Foto: Especial
Sindicalizados acusan uso político de Cobaep a favor del PRD y candidatos
Sindicalizados acusan uso político de Cobaep a favor del PRD y candidatos. Foto: Especial

Sindicalizados del Sitracobp acusaron que el dirigente Ricardo Ordaz Pérez, excandidato de Por Puebla al Frente a la alcaldía de Juan C. Bonilla, obligó a docentes y trabajadores del Cobaep a afiliarse al PRD y apoyarlo en sus actos de campaña o serían despedidos.

En rueda de prensa este martes, denunciaron que el líder es protegido y obedece las ordenes del diputado local Carlos Martínez Amador, exdirigente estatal del sol azteca y exdirector general del Colegio de Bachilleres de Puebla (Cobaep).

Solo en este año –afirmaron– al menos 30 maestros de varios planteles agremiados al Sindicato de Trabajadores del Cobaep (Sitracobp) han sido despedidos por negarse a militar en el PRD, o porque no acudieron a los mítines de campaña de los candidatos perredistas.

Teresa Flores Pérez y Felipe Meza Torres, unos de los afectados, señalaron que los despidos irregulares comenzaron en el 2011, a partir de la llegada de Rafael Moreno Valle a la gubernatura del estado, pero las víctimas no denuncian públicamente por miedo a represalias.

Si bien reconocieron que ellos simpatizan con Morena y sus candidatos (por eso pidieron utilizar la sede para denunciar), precisaron que el resto de los despedidos son apartidistas o apoyan a otros partidos.

Sin embargo, refirieron que todos se han defendido legalmente, pues se saben de al menos 150 demandas laborales contra el Cobaep, producto de las represalias por no ceder a las presiones de Ordaz Pérez.

Usan plazas para amenazar

Entre las injusticias denunciadas destaca el uso de plazas para “presionar, humillar, corromper o condicionar” a los trabajadores, ya que son amenazados con que serán cambiados de adscripción, quitarles horas de clase a los profesores o de plano despedirlos.

Mientras los que se oponen son castigados, quienes ceden o incluso se coluden son beneficiados con más horas de clases o con ascensos dentro del plantel donde trabajen o al interior del Sintracobp.

Como ejemplo refirieron el caso de Olivia Tosqui Almazán, directora del plantel 1 del Cobaep, en la colonia San José Xilotxingo, en la ciudad de Puebla, que permanece en el cargo a pesar de que –afirmaron– el personal, padres de familia y docentes exigen su destitución.

Esto debido a que la señalan de incurrir en acoso laboral, prepotencia y maltrato al personal.

Al considerar que todo esto es cometido con anuencia de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el gobierno del estado, no exigieron su intervención, pues señalaron que ya lo han hecho y no han actuado.