El coordinador en Puebla del próximo gobierno federal, Rodrigo Abdala Dartigues, sentenció que en el presupuesto de 2019 para el estado se impedirá que haya “partidas secretas” como en los últimos años, las cuales no se reflejaron en desarrollo y prosperidad para ciudadanos.
Además, en entrevista con Ángulo 7, puntualizó que en este periodo de transición a nivel federal sólo se reunirá con el actual gobernador Antonio Gali Fayad que termina su gestión el 14 de diciembre.
Al tiempo de reconocer que existe un tema de impugnación sobre el resultado de las elecciones para la gubernatura, motivo por el que esperará a que se dé un fallo y entonces poder trabajar con la nueva administración estatal.
Sin embargo, dejó en claro que su representación trabajará ajena a coyunturas o caprichos políticos, ya que es la tónica del presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Confió en que el presupuesto para la entidad poblana vaya en aumento como se ha dado en los últimos ocho años, pero con la diferencia de que se “vigilará que no se use en canonjías ocultas como ha ocurrido”.
Recursos sin reflejo
Señaló que los recursos ejercidos en Puebla no se han reflejado en “el bolsillo” de las familias, por lo que el gobierno federal entrante no permitirá esa situación, ya que se eliminarán aquellos programas electoreros o que se prestaron para corruptelas.
Lo anterior en referencia a las grandes obras como el segundo piso de la autopista México-Puebla, los arcos de seguridad y el Museo Internacional Barroco.
Recordó que López Obrador trae consigo programas con un impacto social como son el aumento a las pensiones para adultos mayores, becas a estudiantes de preparatoria y universidades, apoyos a personas con discapacidad en situación de pobreza así como para el primer empleo.
Abdalá Dartigues dijo que todavía no se ha acordado una reunión con el gobernador poblano, pero tendrá que ser en estos cuatro meses previos al cambio de la Presidencia de la República, una vez que se dé a conocer el esquema de trabajo de las coordinaciones estatales.
Adelantó que será el mismo para todos los estados a fin de garantizar una implementación eficaz y transparente de los programas así como de los recursos públicos.
Seguirán delegaciones y sin despidos
Por otra parte, aclaró que la descentralización de las secretarías federales a otras entidades no implica la desaparición de las delegaciones y despidos de trabajadores sindicalizados o su migración, como se ha venido manejando, sino más bien generar una armonización del trabajo.
Aunque, puntualizó, que en el caso de los empleados de confianza serán sometidos a una evaluación para determinar sus resultados en las áreas donde se encuentran.
Reiteró que será hasta que se dé a conocer la operación de las coordinaciones estatales, cuando busque una reunión con las secciones sindicales en las delegaciones para explicar a detalle el esquema como funcionarán.
