La Cámara de Diputados de Argentina aprobó este jueves el proyecto para legalizar el aborto hasta la semana 14 de gestación, con 131 votos a favor, 123 en contra y una abstención; deberá pasar al Senado para su discusión antes de convertirse en ley.
Este jueves, miles de personas con distintas opiniones se congregaron a las afueras del Parlamento argentino, en Buenos Aires, durante las 22 horas que duró el debate, donde la tendencia en el voto fue variando a lo largo de las últimas horas con poco margen de diferencia.
La iniciativa, un objetivo fundamental del movimiento feminista que dividió las opiniones tanto dentro del oficialismo como de la oposición, pasará a la Cámara Alta, donde se prevé que será rechazada por muchos senadores que representan a provincias que tienen influencia de la Iglesia Católica.
Los defensores del proyecto de despenalización celebraron el resultado ondeando pañuelos verdes -símbolo de la causa-, en apoyo a la lucha por los derechos de las mujeres; mientras. los críticos que vestían de blanco, en su mayoría católicos, expresaron su rechazo diciendo que es “inmoral”, pues implica acabar con una vida.
Se evitará la muerte de miles de mujeres
Los legisladores que se manifestaron en contra alegaron su catolicismo y advirtieron que el aborto legal va en contra del ordenamiento jurídico argentino, “que garantiza la vida desde el momento de la concepción”, pero los que votaron a favor argumentaron que evitará la muerte de miles de mujeres humildes expuestas a complicaciones por abortos clandestinos.
Mayra Mendoza, una de las impulsoras del proyecto, señaló que se trata de un tema de salud pública “que no puede ser abordado con anteojeras ni morales ni éticas ni ideológicas, y mucho menos religiosas”, y afirmó que también “es un tema de justicia social”.
Argentina solo permite el aborto en casos de violación y riesgo para la vida o salud de la madre, de manera que los impulsores de la nueva norma consideran que con esta ley las mujeres pobres estarán en condiciones de interrumpir el embarazo de forma segura, ya que anualmente hasta 520 mil realizan abortos clandestinos, según una estimación del Ministerio de Salud, en 2016.
Es de señalar que el presidente Mauricio Macri, que se ha manifestado en contra de la interrupción voluntaria del embarazo, se comprometió a no vetar la norma en caso de que sea aprobada.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
