El candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador sostuvo que a cinco días del debate por la gubernatura de Puebla, el candidato de Juntos Haremos Historia, Miguel Barbosa Huerta, supera por 20 puntos a su rival de Puebla al Frente, Martha Erika Alonso Hidalgo.
De manera tajante, aseguró que ya no hay empate técnico entre ambos, pues el senador con licencia ya se despegó considerablemente de la esposa del exgobernador Rafael Moreno Valle en las preferencias del voto.
Antes de concluir un mitin en Teziutlán este miércoles, llamó a la gente a apoyar al candidato de Morena en las tres semanas y media que restan de campaña, pues aunque presumió la ventaja, pidió “no confiarse”.
Urgió a participar en la elección, observando las casillas y supervisando el conteo y cómputo de votos para impedir un “fraude” a favor de la candidata panista.
No criticará a Alonso para evitar demandas
En esta ocasión reconoció que no criticaría a Alonso Hidalgo como en sus visitas previas a la entidad para que “no lo demanden”, así que únicamente exhortó a la multitud rechazarla.
Esto después de que la candidata y su partido lo denunciaron a él y a Barbosa Huerta ante el Instituto Electoral del Estado (IEE) por presunta violencia política de género, luego de que en otros mítines señalaron que representa una reelección disfrazada de su marido.
Por lo anterior, solo pidió no vender el voto por ella ni por algún otro abanderado de Puebla al Frente”, así como también exigió nuevamente el “voto parejo” por los candidatos de Juntos Haremos Historia.
Calificó como una “marrullería” la campaña de la expanista Violeta Lagunes Viveros que promueven el voto diferenciado en Puebla bajo la consigna “AMLO sí, Barbosa no”.
“Olviden eso, para que haya transformación debe haber voto parejo; no se trata de votar solo por quien les cae bien; hay que votar por todos para que haya un cambio”, defendió.
