El Congreso de Puebla está considerando impugnar el amparo que libró al panista Eduardo Rivera Pérez de 12 años de inhabilitación y dos multas de 12 millones de pesos; en los próximos diez días decidirá si irá en contra o lo acatará.
El presidente Carlos Martínez Amador detalló que el área jurídica está analizando la sentencia del juez Tercero de Distrito en Materia de Amparo Civil y busca impugnarla, con el fin de que el exalcalde de Puebla sea sancionado.
Aunque la justicia federal resolvió “amparar y proteger” al también candidato a la alcaldía de la capital y ordenó al Legislativo revocar las penas, el diputado perredista reconoció que en lugar de acatar el fallo, se contempla ir en contra.
Esto al enfatizar que el Congreso seguirá haciendo “lo que le corresponde”, pues las sanciones impuestas en abril del 2017 son consecuencia de un presunto daño patrimonial por 2 mil 500 millones de pesos.
Al dejar en claro que en lo personal continuará en la postura de defender las sanciones, reconoció que primero se analizará la forma de promover la impugnación y luego se votará en la Junta de Gobierno si se presenta o no.
Cabe recordar que las penas se deben a supuestas irregularidades en la cuenta pública 2013 del panista, cuando fue presidente municipal de la capital, cargo por el que este año competirá de nuevo.
Sin embargo, el pasado 6 de marzo, Rivera Pérez fue exonerado de la inhabilitación de 12 años y dos multas de 12 millones 798 mil pesos impuestas por el Congreso y la ASE por presunto daño al erario.
Mientras que ese mismo día, diputados de PAN, PRI y PRD advirtieron que el proceso que enfrenta el panista aún no concluye, pero se comprometieron a acatarlo y emitir otra resolución.
Por su parte, el líder municipal del PAN en Puebla, Pablo Rodríguez Regordosa, consideró que no es necesario impugnar, pues el fallo del juez le dio la razón a Rivera Pérez.
Descartó que el amparo haya exhibido a los diputados y negó que en lo particular considere al exalcalde como culpable y aseguró que el candidato a la alcadía de Puebla usó el procedimiento del que fue objeto para impulsar su carrera política.
Por tal motivo, desechó que las cuentas públicas se utilicen en el Congreso como “garrote político”, pues aseveró que, por el contrario, en este caso se convirtió en “un elemento de proyección política”.
“Que quede claro que yo nunca dije que Eduardo Rivera fuera corrupto, yo denuncié que siempre mantuvo un papel de víctima; si tenía las pruebas de su inocencia, por qué las presentó hasta ahora y no antes”, criticó.
A pesar de ello, dijo estar dispuesto a apoyarlo en su búsqueda por la alcaldía de Puebla, pero reconoció que no por el hecho de que ya haya limado asperezas con él, sino porque como dirigente está obligado a apoyar a todos los candidatos del PAN.
