Tras los sismos del 7 y 19 de septiembre, en Puebla, Morelos y Oaxaca, hubo fallas en la coordinación de las autoridades de los tres niveles de gobierno con la sociedad civil, así como una incompleta recolección de datos y escaso uso de los albergues.
Así lo acusó Oxfam, una confederación internacional de organizaciones de ayuda humanitaria, a través de un comunicado de prensa, donde detalló un diagnóstico y tres de recomendaciones, luego de enviar equipos de evaluación a dichos estados, tres de los más afectados por los terremotos.
Señaló que en las entidades detectó falta de coordinación entre los tres niveles de gobierno, el sector privado y la sociedad civil, lo que ocasionó que en algunas zonas afectadas la ayuda llegara más de una vez, mientras que en otras faltó atención.
Además, consideró que “la respuesta de la sociedad sobrepasó la capacidad de las instituciones para canalizar las donaciones, y a esto se sumó la desconfianza de la misma ciudadanía sobre la presunta politización de los recursos”.
Censos de daños, “inadecuados”
Asimismo, determinó que las autoridades no han hecho un censo adecuado de los daños ni de las personas afectadas, y que la poca información recabada por el gobierno no detalla a los damnificados por género, grupo étnico, edad o si sufren discapacidades.
Lo anterior, –indicó– dificulta la atención a los damnificados, “además, (las autoridades) desconocen los mecanismos internacionales de respuesta a una crisis humanitaria”.
Identificó que los más afectados son las personas de escasos recursos, quienes además han detenido sus actividades económicas o las han perdido; mientras que las mujeres permanecen en sus casas porque las escuelas no han reanudado las actividades en su totalidad.
Encontró que, en muchos casos, las personas sólo acuden a los albergues a recibir ayuda, pero no permanecen en los mismos, debido a que dichas instalaciones son inadecuadas o por miedo de perder las pertenencias que dejaron en sus casas.
Ante tal situación, advirtió que los damnificados incluso duermen en sus patios o en sus banquetas, lo cual, denota la urgente necesidad de reconstrucción de viviendas.
Sus recomendaciones
Por lo anterior, la organización emitió tres recomendaciones, de las cuales, la primera está orientada a mejorar la coordinación entre los tres actores involucrados, lo que evitará la duplicidad de ayuda y mejorará la distribución de los insumos.
En la segunda, exhortó a las autoridades a realizar censos detallados en el reconocimiento de las necesidades específicas de cada grupo, y diseñar soluciones en ese sentido.
Pidió integrar los esfuerzos de rehabilitación y reconstrucción con prontitud, así como incrementar los estándares a favor de una mayor calidad en la infraestructura, en especial en escuelas y hospitales, previniendo futuros desastres.
Oxfam indicó que se concentró en detectar necesidades de acceso a alimento y agua, saneamiento e higiene, así como de protección y respeto a los derechos de las personas afectadas, con perspectiva de género.
Finalmente, puntualizó que implementó un plan de respuesta de 18 meses, de septiembre de 2017 a marzo de 2019, en el que atenderá 186 municipios de los tres estados mencionados “en especial en los que se encuentre riesgo de que las personas sean excluidas de las acciones gubernamentales”.
