Los cinco regidores del PAN que votaron en contra la cuenta pública 2016 del edil de Puebla, Luis Banck Serrato, acusaron que la ASE usa criterios “poco claros” para analizar los ejercicios financieros de los sujetos obligados.
En entrevista, al final de la sesión extraordinaria de Cabildo realizada el martes, donde se dictaminó la cuenta pública del alcalde, el regidor Juan Carlos Espina Von Roherich señaló que “a raíz de las últimas actuaciones” de la Auditoría Superior del Estado (ASE), él y cuatro compañeros de su fracción decidieron “tomar nota” de los criterios que usa.
De hecho, aseguró que “hay lagunas” en sus rúbricas de análisis, como el hecho de que no se especifica de qué forma se tienen que cotejar algunos impuestos.
Señaló que a veces pide que se incluyan las partidas laborales y otras no, así como que en ocasiones solicita incluir las obras realizadas con el estado y en otras no.
A raíz de esto –aseveró- quedan mal asentados los recursos, que posteriormente provocan que haga observaciones.
Sin decirlo, Espina Von Roherich dejó entrever que a su consideración el organismo saca provecho de sus criterios.
Sin embargo, a la pregunta expresa de si la ASE juzga deliberadamente de manera diferenciada las cuentas públicas por intereses políticos, respondió que no.
No hay venganza política, asegura Arrubarrena
Por su parte, Arrubarrena García negó que su rechazo a la cuenta haya sido por “venganza política” por las sanciones al exedil Eduardo Rivera Pérez, sin embargo, los comentarios sobre la ASE dejan ver lo contrario.
Calificó de “burda e ilegal” la inhabilitación por 12 años y la multa de 25 millones de pesos al exedil impuestos por el Congreso local tras las supuestas irregularidades encontradas por la ASE en su cuenta pública 2013.
Por ello, ambos regidores advirtieron que continuaran en la exigencia de que la auditoría les aclare los criterios que utiliza para el análisis de las cuentas.
Además de él, Adán Domínguez Sánchez, Guadalupe Arrubarrena García, Myriam Arabián Cuottolenc y Marcos Castro Martínez votaron en contra la cuenta pública de Banck Serrato, argumentando que primero querían que la ASE aclarara los criterios que usa.
De hecho, antes de dictaminarla, pidieron una moción para postergar hasta la última semana de abril su aprobación en el Cabidlo, a fin de que el organismo les detallara sus normativas.
Sin embargo, la petición fue negada y la cuenta se aprobó con 16 votos a favor.
