La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en conjunto con el sector privado pusieron bolsas de trabajo a disposición de los connacionales que regresen al país debido a las políticas migratorias implementadas por el gobierno de Donald Trump.
Lo anterior dio a conocer el titular de la dependencia, Alfonso Navarrete Prida, quien dijo que esta medida se tomó como precaución en caso del regreso de migrantes, para que con esta herramienta puedan ser colocados en el mercado de trabajo inmediatamente.
Asimismo, señaló que existe el riesgo de que los migrantes desplacen a la mano de obra ya instalada –que generalmente es la población más vulnerable—, pues los connacionales que llegan de Estados Unidos tienen mayores capacidades y podrían quitarles sus puestos, aunque no ha pasado.
El delegado informó que la Secretaría de Gobernación (Segob) tiene un programa en coordinación con el sector empresarial tienen una bolsa de trabajo con el mismo fin y se firmó un programa con Guatemala, El Salvador y Honduras para intercambiar mano de obra para atender las necesidades de los migrantes que se quedan en México al no poder ingresar al país vecino en busca del “sueño americano”.
Sí hay trabajo para los migrantes
Consideró que el país es capaz de recibir a los migrantes desempleados y colocarlos en el mercado laboral.
Navarrete Prida puntualizó que hay varios acuerdos entre dependencias del gobierno como el Servicio Nacional de Empleo (SNE) con el programa de apoyo a repatriados y la Segob con el sector privado, así como la firma de acuerdos migratorios con los países fronterizos de Centroamérica.
Por otra parte, aseguró que la STPS espera a que el Inegi, Coneval o Banco de México den a conocer las cifras oficiales del impacto del “gasolinazo” en los salarios para saber si es necesario hacer un incremento.
Posible aumento al salario mínimo
A pesar de esto, el delegado sostuvo que de acuerdo a un estudio interno de la dependencia, el impacto en el poder adquisitivo causado por alza en los precios de las gasolinas fue de 3 por ciento, pero recalcó que es necesario esperar las cifras oficiales.
Debido a lo anterior, precisó que si se comprueba dicho impacto –del 3 por ciento o mayor— la STPS se reunirá en marzo con el sector privado para analizar un posible aumento al salario mínimo.
Es de señalar que antes del “gasolinazo”, el salario mínimo había ganado terreno, al recuperar un 18 por ciento de su poder adquisitivo, debido a que sufrió de un aumento durante el 2016.
Editado por: Carlos Rodrigo Balcázar Placeres
Fuentes: Excélsior, La Jornada
