El 56.7 por ciento de los mexicanos de entre 24 y 64 años considera que su situación económica es mejor que la de sus padres, mientras que el 23.5 opina lo contrario; la escolaridad y nivel socioeconómico de la población dependen de las de sus progenitores.
Así lo señaló el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), en el “Módulo de Movilidad Social Intergeneracional”, que analiza las transformaciones de los niveles de escolaridad (Movilidad social educativa) y de situación socioeconómica (Movilidad social ocupacional) entre generaciones.
Para tal estudio, la población estimada de 25 a 64 años fue de 61 millones 827 mil 469 personas –32 millones 550 mil 407 mujeres y 29 millones 277 mil 062 hombres–, de quienes, 65 por ciento tuvo al padre como proveedor principal a los 14 años de edad, 14.4, a la madre, 10.1, a ambos, y el 10.3, a una persona distinta a los progenitores.
El 47.5 por ciento de quienes tuvieron a ambos padres como proveedores –indica–alcanzó el nivel de escolaridad media superior o superior, mientras que a mayores niveles de escolaridad del proveedor principal, dicha población presenta niveles de escolaridad más altos.
50 por ciento sigue la profesión de sus padres
En lo que respecta a la movilidad social ocupacional, el documento reporta que si el proveedor económico tuvo una ocupación de alta calificación (funcionarios, directores, jefes, profesionistas y técnicos), el 50 por ciento de los dependientes económicos están activos en un trabajo con el mismo nivel de calificación.
En el 44.1 por ciento de los ocupados como profesionistas y técnicos, el proveedor económico también tuvo este tipo de ocupación.
Por otra parte, de las personas que se clasificaron en las tonalidades de piel más clara, solo 10 por ciento no cuenta con algún nivel de escolaridad, mientras que la cifra se eleva al 20.2 por ciento en la población que se clasificó en las tonalidades más oscuras de piel.
Asimismo, para las tonalidades de piel más oscura, el 48.6 por ciento se percibe con una mejora en su situación socioeconómica, en comparación con la tonalidad de piel más clara (52.2 por ciento).
