Durante la entrega de tarjetas con dinero para apoyar la reconstrucción de viviendas en Chiapas, el presidente Enrique Peña Nieto propuso a los damnificados emplear este recurso en forma de “tandas” para reedificar sus casas por turnos.
Lo anterior, a un mes del sismo del 7 de septiembre, que afectó principalmente a esta entidad y la vecina Oaxaca, que, en conjunto, reportaron un estimado de 800 mil damnificados, a quienes el gobierno de federal –dijo el mandatario– otorgará 120 mil pesos en dos pagos, si acreditan pérdida total de su vivienda, y 15 mil, si los daños fueron parciales.
Durante su visita al ejido Benito Juárez de Villaflores, en el municipio chiapaneco de Tuxtla Gutiérrez, el Ejecutivo federal aseveró, ante un grupo de personas afectadas, que ha “pensado” en la posibilidad de que “grupos de cuatro o cinco familias” se organicen “a modo de tanda” para construir entre todos “una primera casa (se sortea la de quién), luego la que sigue y la que sigue, y así las cuatro casas”.
Sin desarrollar su idea a detalle, aseguró que, si bien algunos lo han tildado de ser demasiado optimista al creer “que en cuatro o cinco meses las viviendas estarán reconstruidas”, confía en que “con la ayuda y el compromiso de todos ”la reconstrucción se realizará de “manera muy rápida y acelerada”.
Cabe recordar que, el pasado 27 de septiembre, al declarar el inicio de las obras de reconstrucción, Peña Nieto estimó que el costo de estas asciende a 38 mil 150 millones de pesos, de los cuales 16 mil 500 se destinarán a viviendas.
Asimismo, indicó que los recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) no serán suficientes para cubrir dicho monto por los que, junto con el presidente de Consejo Coordinador Empresarial (CCE), también anunció la creación del fideicomiso privado “Fuerza México”, en el cual se espera reunir mil 500 millones de pesos procedentes de donaciones.
