El presidente de la República, Enrique Peña Nieto, aseguró que se aplicará “todo el peso de la ley” a los responsables de la agresión del miércoles contra elementos del Ejército en Palmarito Tochapan, municipio de Quecholac, donde murieron cuatro soldados.
Tras condenar el ataque “cobarde”, afirmó que se iniciará una estrategia para hacer frente a este delito, no solo en Puebla, sino en todo el país.
En una ceremonia realizada en el Campo Marte, como parte de la conmemoración de la batalla del 5 de mayo, el primer mandatario externó sus condolencias a las familias de los uniformados caídos en cumplimiento de su deber.
Por ello, sostuvo que ahora el objetivo es “desarticular” a todas las bandas dedicadas al robo de combustible.
El Ejecutivo nacional puntualizó que robar combustible “es un delito”, por lo que las personas que lo practican “exponen a sus familias”.
“Utilizan” a pobladores
Además, advirtió que la delincuencia organizada “engaña y utiliza” a los pobladores, por lo que los exhortó a denunciar a los chupaductos.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Policía Federal (PF) y la Procuraduría General de la República (PGR) serán las encargadas de realizar la estrategia de seguridad para frenar este delito que se disparó en la entidad poblana en los últimos años.
La mañana de este viernes, la PGR informó que ya se inició una carpeta de investigación por los hechos del pasado 3 de mayo y se castigará a los responsables.
En el enfrentamiento con delincuentes en Quecholac, murieron cuatro soldados, además de seis civiles.
También, 14 personas fueron detenidas tras el operativo que se realizó en la zona luego de encontrar una toma clandestina de combustible, la cual defendieron con armas de fuego los ladrones.
Fuentes: Excelsior/La Jornada/Animal Político
