Ante el proteccionismo de Donald Trump, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció que su política exterior estará basada en la diversificación del comercio internacional y la negociación del libre flujo de productos y remesas con E. U.
En conferencia desde Los Pinos, el ejecutivo federal detalló que la política exterior mexicana se orientará en dos direcciones: el fortalecimiento de la presencia de México en el mundo y la construcción de un diálogo efectivo con el nuevo gobierno de la unión americana.
Sin abundar en detalles, señaló que el país mantendrá vínculos comerciales y políticos con países de América Latina, Europa, Asia Pacífico, Medio Oriente y África, destacando un tratado de libre comercio con la Unión Europea y el incremento de las relaciones con países como Argentina, El Salvador y Guatemala.
Acompañado de gobernadores y miembros de su gabinete, y ante reporteros, empresarios y líderes de organizaciones sociales, Peña Nieto señaló que su gobierno buscará asegurar el comercio sin aranceles y el libre flujo de remesas, así como inversiones en el sector de telecomunicaciones.
Las remesas –aseguró– suman más de 24 mil millones de dólares a la economía mexicana, dinero necesario para promover el desarrollo social, sobre todo el de los sectores más pobres de la población.
Se buscará protección a migrantes y desarrollo compartido
Las negociaciones se basarán en 5 puntos: la soberanía nacional, el respeto al estado de derecho, una visión constructiva y propositiva, la integración de la región Norteamérica y la negociación integral, que conlleva poner sobre la mesa todos los temas que afectas tanto a México como a Estados Unidos.
Y se buscarán otros ocho objetivos además del libre comercio y remesas: el respeto de los derechos de los migrantes, la repatriación ordenada y coordinada de connacionales, el desarrollo compartido de México, Estados Unidos y Canadá, mejores salarios para los mexicanos, frenar el comercio ilegal de armas, proteger las inversiones nacionales y extranjeras, y trabajar en la construcción de una frontera más segura.
En este último punto, Peña Nieto no agregó detalles sobre cómo se financiará tal proyecto, ni repitió su consigna, como hace algunos días, de que México no pagará el muro prometido por Donald Trump.