Rex Tillerson, secretario de Estado de Estados Unidos, anunció de manera oficial la decisión de reducir aproximadamente el 60 por ciento de su personal en la embajada estadounidense en Cuba y advirtió a los viajeros no visitar la isla.
La medida responde a una serie de “ataques específicos” que han afectado a diplomáticos estadounidenses y familiares durante su permanencia en la Isla. Al menos 21 empleados han sido blanco de ataques.
Los individuos afectados han presentado una serie de síntomas físicos, que incluyen problemas y pérdida de audición mareos, dolor de cabeza, fatiga, asuntos cognitivos y dificultad para dormir.
A través de un comunicado el Departamento de Estado señaló que “La decisión de reducir nuestra presencia diplomática en La Habana se hizo para garantizar la seguridad de nuestro personal. Mantenemos relaciones diplomáticas con Cuba y nuestro trabajo en Cuba continúa guiado por los intereses de seguridad nacional y de política exterior de Estados Unidos. Cuba nos ha dicho que continuará investigando estos ataques y continuaremos cooperando con ellos en este esfuerzo“.
Además añadió que “Los investigadores no han podido determinar quién es responsable o qué está causando estos ataques”.
Finalmente, respecto a la advertencia de viaje, el secretario Tillerson expresó en el comunicado que “no tenemos informes de que ciudadanos civiles estadounidenses se hayan visto afectados, pero se sabe que los ataques se han producido en residencias diplomáticas de Estados Unidos y en hoteles frecuentados por ciudadanos estadounidenses“.
Editado por Lorena González Guzmán
Fuentes: Exhaustiva/El Financiero
