Debido a que el gobierno federal no está mandando los recursos al estado y municipios, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) local, prendió los “focos rojos”, ya que la obra pública decreció 32 por ciento en lo que va del año.
José Antonio Hernández González, presidente de ese organismo con más de 300 socios, comentó que su sector se ha tenido que refugiar en hacer poyectos privados para no perder dinamismo, lo cual representan en este momento el 68 por ciento de la actividad total.
Expuso que hay magnos proyectos del gobierno estatal que no han arrancado por la falta de participación del gobierno federal.
Bajo este panorama, dijo que los obliga a buscar oportunidades en otras entidades donde no se ha tenido un impacto tan negativo por la tardanza de recursos federales.
Comentó que tienen una reunión pendiente con el gobernador Antonio Gali Fayad para conocer la situación y, con ello, determinar su participación en los proyectos que tengan en lo que resta del año.
Impacta alza del cemento
Sin embargo, con el encarecimiento que se ha dado de los materiales como son varilla, acero, alambrón y cemento, este último que ha alcanzado hasta un alza del 27 por ciento durante el primer semestre, implicará que los costos de obras en ejecución tengan al final un sobrecosto del 10 por ciento, el cual deberán pagar los gobiernos o clientes privados.
“Los constructores nos hacemos responsables en este momento de las alzas que se tienen en las obras por los materiales, pero tenemos que pasarlo en factura al cliente o autoridad”, apuntó.
Hernández González atribuyó también los encarecimientos a la depreciación del peso frente al dólar y la incertidumbre que se generó por la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, lo cual propició un aumento gradual de las tasas de interés que se refleja en los costos de financiamientos.
Puntualizó que presentaron un paquete de 120 proyectos al gobierno estatal, algunos que oscilan en los 500 mil pesos y otros en 100 millones de pesos, enfocados a infraestructura carretera, movilidad en la ciudad y remodelaciones de tramos, pero dada la caída de los recursos federales, desconocen si vayan a ser incluidos.
En el caso de magnos proyectos como son Línea 3 de RUTA –similar al metrobús, el distribuidor Las Carmelitas, la recuperación de un bosque para convertirlo en parque público, que se estiman en 850, 661 y 300 millones de pesos, respectivamente; podrían sufrir incrementos en sus costos finales, dijo.
