Pese a que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, decidió reconocer a Jerusalén como la capital de Israel y trasladar ahí la embajada de su país, el gobierno mexicano mantendrá la suya en Tel-Aviv y “apoyará las reivindicaciones” de Palestina.
Así lo manifestó este miércoles la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), mediante un comunicado de prensa, donde, con una redacción escrupulosa, el gobierno mexicano cuidó no condenar la determinación de Trump y aseguró que procurará “una relación bilateral estrecha y amistosa con el Estado de Israel”.
En este sentido, recordó la reciente visita al país del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pero también afirmó que “seguirá apoyando las reivindicaciones históricas del pueblo palestino”, que, desde 1948, año de la creación de Israel, busca el reconocimiento internacional de una Palestina independiente.
Este reclamo se apoya en el plan de escisión de Palestina, adoptado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1947, en el cual se plateó que Jerusalén –ciudad sagrada para judíos, musulmanes y cristianos— quedara bajo el control de un gobierno internacional.
85 países mantienen embajadas en Tel Aviv
Sin embargo, en 1980 Israel declaró a Jerusalén capital “una e indivisible” de su Estado, por lo que el Consejo de Seguridad de la ONU urgió todos los países miembros a retirar sus embajadas de la ciudad.
Hasta hoy, 85 países que mantienen relaciones diplomáticas con Israel mantienen su embajada en la ciudad de Tel Aviv, a la que reconocen como la capital de este país.
De acuerdo con internacionalistas, la determinación de Trump agravará la disputa de casi 70 años entre israelíes y palestinos por el control de la ciudad.
Editado por Luis Alberto Palacios