Por segundo día consecutivo, habitantes de Cuautlancingo se manifestaron frente a la presidencia municipal para exigir reforzar la seguridad, pues acusaron que en estos cuatro días, al menos 10 taxistas han sufrido asaltos, pero el edil Félix Casiano Tlahque no los recibió.
“Queremos a Casino”, “Que venga el presidente”, “queremos seguridad” fueron las exigencia de más de un centenar de vecinos que se volvieron a dar cita este jueves al asegurar que la ola de delincuencia ha rebasado a las autoridades municipales, quienes han hecho caso “omiso” a todas las peticiones.
“Nos hacen dar vueltas y vueltas y no resuelven”, expresó uno de los quejosos “hay una patrulla por cuadrante y hasta hoy iniciaron los rondines“, explicó otro de los vecinos.
Y es que reiteraron que tan sólo en la calle Álamos en esta semana 10 taxistas han sufrido asaltos, y aquellos que ayudan a los empleados del volante reciben pedradas en sus casas por parte de los delincuentes.
“Hacen bailes y toda la cosa, ahí si hay toda la seguridad pero deben poner dinero para la seguridad de todos los vecinos”.
Ni el comisario de Seguridad asistió
Casiano Tlahque y el comisario de Seguridad Pública, Gilberto Herrera López, brillaron por su ausencia; sólo mandaron al responsable de prevención ciudadana, quien sólo se prensentó como “Jesús” sin querer dar sus apellidos pese a que es un funcionario y quien nada pudo hacer ante las exigencias de los vecinos.
Las puertas del palacio municipal fueron cerradas ante la presencia de los ciudadanos, quienes lamentaron el actuar del presidente municipal, quien –argumentaron– sólo les ha dado largas y no una solución, de hecho, dejaron entrever que, de no contar con el apoyo, podrían tomar la seguridad en sus manos.
“Él (Casiano Tlahque) tocó puerta por puerta para que le diéramos el voto, es necesario que dé la cara. Solo nos da largas y ninguna solución”.
