Este viernes, una bomba casera explotó en uno de los vagones de la estación de metro Parson Green, en Londres, Inglaterra, lo que dejó un saldo de 22 personas heridas, pues presentaron diversas quemaduras.
Primeras versiones indicaron que el posible atentado terrorista se registró en “hora pico” para así provocar un mayor daño.
Al respecto, la primera ministra de Reino Unido, Theresa May, confirmó que dicho país se mantiene en alerta terrorista “nivel grave“.
Agregó que la explosión tenía como fin provocar un gran daño, sin embargo, hasta el momento no se han registrado pérdidas humanas.
Por otra parte, Scontland Yard informó que desplegaron a cientos de agentes para investigar el caso y poder atrapar al culpable.
También están analizando las cámaras de seguridad para así localizar al implicado y determinar por dónde entró y salió.
Diversas fuentes sostuvieron que el artefacto explotó parcialmente, presuntamente porque que el detonador falló, ya que de haber funcionado, podría haber provocado un mayor número de heridos.
Es de señalar que dicho metro de la línea “District” –en la zona de Fulham— tiene una capacidad para 865 pasajeros.
Mientras que el presidente de Estados Unidos opinó que dicho ataque pudo haber sido prevenido por Scotland Yard y criticó que no hayan detenido al terrorista.
Cabe mencionar que en junio, se registraron dos ataques terroristas en Londres, pues sujetos atropellaron a peatones y acuchillaron a personas, en donde al menos siete personas perdieron la vida.
En marzo también se registró otro atropellamiento masivo en las inmediaciones del Parlamento británico, lo que dejó al menos tres muertos y cerca de 40 heridos.
Además, en abril, una persona arrojó acido sobre varias personas, dejando al menos 12 heridos.
Editado por: Carlos Rodrigo Balcázar Placeres
Fuentes: El País/El Mundo