Belén Cancino/El Sol de Puebla

Con la zozobra de que es cuestión de tiempo para que la línea 3 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) los eche al desempleo, se encuentran decenas de choferes de las rutas Bulevar CU y Rápidos de San Antonio, dos de las seis rutas urbanas que serán eliminadas.

Abordados por El Sol de Puebla, operadores de ambas líneas confesaron que se encuentran en total incertidumbre, pues ni ellos ni los concesionarios, tienen información clara y precisa acerca de cuándo o cómo desaparecerá el servicio que prestan.

La mayoría, dijo, saben de su destino porque han escuchado o leído al gobernador, Antonio Gali, anunciar que la siguiente troncal de la RUTA será justo en su derrotero y porque vieron o vivieron que así ocurrió con sus compañeros de otras rutas, cuando se dio paso a las dos primeras líneas del mismo sistema de transporte.

Según los propios trabajadores, la línea 3 de la RUTA sacaría de operación a 71 unidades de la ruta Rápidos de San Antonio y 80 de la ruta Bulevar-CU, lo que afectaría a unos 80 concesionarios y a aproximadamente 150 conductores.

Noel es uno de los pocos choferes a quienes su patrón ya le advirtió que la ruta Rápidos de San Antonio “va para afuera”, más o menos, para el mes de septiembre.

Sin embargo, agregó, esa es la única información que le ha compartido el permisionario con el que trabaja, porque hasta el momento no ha recibido alternativa alguna a su inminente desempleo, “que nos digan que vamos a pasarnos a trabajar para allá, o que nos vayan a tomar como (líneas) alimentadoras, pues no, nada de eso”, completó.

Y es que añadió, ni siquiera su patrón sabe qué sucederá con su permiso para prestar el servicio, “no saben si les van a dar cierto dinero o algo por su concesión”, continuó.

Rubén, chofer de la ruta Bulevar-CU con casi 30 años en el oficio, también sabe su destino porque escuchó a su patrón platicar con una tercera persona, “no me lo dijo a mí directamente pero ya sé que es un hecho”, añadió.

Para él, confesó, será la segunda vez que el Gobierno del Estado, lo desampare, pues la primera vez fue cuando trabajaba para la ruta Mayorazgo, la que se eliminó para la operación de la línea 2.

Además, coincidieron en que aunque les ofrezcan empleo como operadores en la línea 3 de la RUTA, difícilmente lo aceptarían, porque las referencias que tienen acerca de las condiciones de trabajo por parte de quienes ya trabajan o trabajaron en ella, no les son atractivas.

“Les dan 500 pesos por trabajar todo el día, de ahí hay que agarrar para la comida, para los taxis, y aunque ofrecen prestaciones, pues ya con las reformas en cuestión de salud, que según van a quitar todo, pues entonces ya no conviene”, expuso Noel.

“Los horarios y el encierro (del vehículo) porque aquí casi la mayoría tenemos la comodidad de que nos llevamos los carros a la casa, para nosotros eso (el encierro) de las unidades es un inconveniente, porque tendríamos que gastar en el transporte antes y después de trabajar”, añadió Rubén.

Según don Rubén, aunque el trabajo también es pesado, en un buen día puede ganar prácticamente lo mismo pero gastar menos, que si estuviera empleado en la RUTA.

Para finalizar, dudó, con base en la experiencia de las líneas 1 y 2 de la RUTA, que la promesa de servicio mejorado de la línea 3, se cumpla.

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