El relleno sanitario de Chiltepeque podría continuar operando hasta el 2047 tras el embovedamiento que realiza la concesionaria Resa, el cual estará concluido en el 2018, aseguró el encargado de despacho del OOSL, Jesús Mendieta García.
Aunque académicos y ecologistas han señalado que el relleno está a su máxima capacidad, el futuro coordinador del Organismo Operador del Servicio de Limpia (OOSL) municipal de Puebla sostuvo que tras las adecuaciones tendrá al menos otros 30 años de vida útil.
En entrevista, tras su comparecencia ante el Cabildo como parte de la glosa por el informe de gobierno del alcalde Luis Banck Serrato, el funcionario municipal explicó que las modificaciones consisten en unir las celdas “A” y “B” con las que cuenta el relleno, a fin de nivelar el espacio y así haya lugar para más residuos sólidos.
Refirió que actualmente las obras registran un avance del 65 por ciento, por lo que podrían terminar a finales del 2017 o a inicios del 2018.
Con respecto a la inversión que se realizó para los trabajos, mencionó que la desconocía, pues recordó que de acuerdo con la concesión, es la empresa la que obligada a emitir los recursos sin ayuda del gobierno.
Resa podría renovar concesión
En este contexto, vale mencionar que en 2022 concluirá la concesión de Resa, es decir que sólo le restan 5 años, por lo que el extender la vida útil del relleno es una señal de que querrá renovar el permiso para administrar el sitio por 30 años más, o sea, hasta el 2052.
Ante ello, Mendieta García aseguró que “desconoce” las intenciones de la empresa, aunque no descartó que podría buscar extender la concesión, lo cual –dijo- “es su derecho y tienen la libertad de hacerlo”.
Por otro lado, al ser cuestionado sobre por qué no invertir en métodos para reutilizar los residuos en lugar de seguirlos enterrando, afirmó que “ya se está trabajando” en un proyecto para convertir los residuos en biogás, pero reconoció que “aún falta mucho” para lograrlo.
Esto principalmente porque argumentó que se tiene que invertir en infraestructura, tecnología y capacitar al personal o contratar nuevo, lo cual toma “mucho tiempo” y requiere de una gran inversión.
Asimismo, admitió que el proyecto todavía permanece en etapa de investigación, por lo que no se llevaría a cabo sino hasta “en un mediano plazo” y sólo si la administración que asuma el cargo en 2018 da continuidad al proyecto, de lo contrario, se quedaría “solo en el papel.
185 mil toneladas de basura en 2016
Con respecto a su comparecencia, Mendieta García sólo dio datos que recabó el director anterior, pues él tiene menos de un mes de tomar el puesto, tras la renuncia de Víctor Casiano Urrutia.
Por ejemplo, refirió que en 2016 se recolectaron 185 mil toneladas de residuos sólidos, de los cuales, el 40 por ciento era orgánico y se reciclaron a través de la unidad del OOSL que cumple dicha tarea, mientras que el resto fue vendido a empresas.
Por la venta de los metales como el aluminio, los plásticos, el cartón y el papel –detalló– se recaudaron 160 millones 934 mil pesos, los cuales ingresan a las arcas del ayuntamiento.
Destacó la creación del programa de seguimiento vía satélite a cada unidad de recolección de basura, el cual se pondrá en marcha en los próximos días y con el que cada ciudadano podrá ingresar a internet y revisar en tiempo real dónde se encuentra el camión que le corresponde cubrir su domicilio.
Se espera que en los próximos días Mendieta García asuma la coordinación del OOSL, la cual se encuentra vacante desde el 30 de enero.