Denuncian que comedores móviles de Sedesol no funcionan por falta de gas. Foto: Especial
Denuncian que comedores móviles de Sedesol no funcionan por falta de gas. Foto: Especial

Al menos seis Unidades Móviles Alimentarias (UMAs) de la capital poblana llevan tres semanas sin funcionar porque la Sedesol no les ha abastecido el gas, con lo cual se han visto afectadas alrededor de 50 personas al día en cada establecimiento.

Así lo denunciaron encargados de una de las unidades, al revelar que las ubicadas en las colonias Roma, La Ciénega, Naciones Unidas y el Barrio de San Antonio cerraron porque la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) no ha renovado el convenio con la proveedora del combustible.

En ocasiones –indicaron- han puesto hasta 300 pesos semanales de su bolsillo para comprar jabones lava trastes, desinfectantes, cloro, bolsas para basura, servilletas y papel higiénico, los cuales no son proporcionados por la dependencia federal.

Por ello, ante la falta de gas y la experiencia de que la secretaría no les devolverá su inversión, los operadores optaron por dejar de prestar el servicio.

Y es que acusaron que por preparar los desayunos y comidas todos los días no reciben ningún salario y su único pago es lo que sobra.

Paga es poca

Ante la falta de una remuneración, poca gente es la que se ofrece a atender las UMAs, por lo que –aseguraron- la carga de trabajo para quien accede es mucha, pues generalmente solo hay dos personas en cada unidad.

Cada beneficiario paga 10 pesos por desayuno o comida, pero los denunciantes señalaron que “no alcanza” para cubrir todos los gastos, ya que los insumos enviado por la Sedesol resultan “insuficientes”.

Por reglamento, en cada unidad deben estar cuatro cocineras y cuatro ayudante, pero de acuerdo con los denunciantes, normalmente solo hay dos personas que se encargan de todo.

A principios de diciembre, la encargada de Sedesol de llevar el control del abasto -a quien solo identifican como Evelin- les informó que (por tercera vez en 2 años) se cambiaría a la empresa proveedora del gas, sin embargo ya pasaron dos meses y no ha llegado el combustible a las UMAs.

Es por eso que los establecimientos operaron la mitad de enero solo con la reserva que tenían, por lo que los informantes estimaron que de continuar la problemática las unidades cerrarán.