Tres agentes de la Policía Federal Ministerial de la Procuraduría General de la República (PGR) fueron ejecutados y posteriormente calcinados dentro de una camioneta oficial en Zihuatanejo, Guerrero; tenían vínculos con grupos delincuenciales.
Junto a los oficiales, también murió un civil, que hasta el momento permanece en calidad de desconocido.
De acuerdo con las autoridades estatales, la ejecución ocurrió cerca de las cinco de la tarde del pasado jueves, sobre la autopista Acapulco-Zihuatanejo, a 100 metros de las instalaciones de la Policía Federal.
Había narcomensaje
Al interior del vehículo fueron encontrados los cuatro cuerpos cubiertos con leña y en el asiento del lado del copiloto había un fusil de asalto, mientras que a tres metros de distancia los agresores dejaron una cartulina en la que se leía un mensaje que afirmaba que las víctimas eran parte de grupos delictivos.
Los elementos fueron identificados como Carlos Hernández Oropeza, Rafael Arellano Álvarez y José Castro Olivo.
Por su parte, la dependencia federal lamentó los hechos y afirmó que llevará a cabo una “exhaustiva” investigación para identificar y castigar a los responsables detrás de los hechos.
Fuentes: Aristegui Noticias, Excélsior y La Jornada
Editado por: Guadalupe De la rosa