Por Alfonso Ruiz
Leobardo Soto Martínez, dirigente de la CTM, dijo que también en algunas autoparteras y empresas de alimentos, las representaciones laborales rechazaron la aplicación del “banco de horas”, como ocurrió en Volkswagen y su sindicato.
En el caso de la armadora alemana, avaló que el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen de México (Sitiavw) se negará a aceptar el “Punto de Equilibrio”
Indicó que de realizarse una huelga, debido a que la armadora y basificados no lleguen a un acuerdo, sólo sería un “paro técnico disfrazado”; lo cual –dijo— es preferible que irse al banco de horas.
Paros técnicos sin afectaciones
Afirmó que las autoparteras de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) no se verían afectadas, pues –mencionó– no sólo dependen de la empresa alemana, ya que han experimentado paros técnicos de Nissan y uno reciente de Ford sin mayores complicaciones.
Detalló que la confederación tiene 19 proveedoras afiliadas con, aproximadamente, entre 15 y 16 mil trabajadores, que se encargan desde la logística hasta la transportación de los vehículos.
Asimismo, aseveró que el principal problema para que llegue, a San José Chiapa, la empresa armadora de vehículos eléctricos es el precio de la tierra, ya que el metro cuadrado, incluyendo servicios, cuesta mil pesos y en Tlaxcala sólo 200 pesos.
Cabe mencionar que, el pasado 26 de mayo, Soto Martínez anunció que 500 trabajadores de distintas proveedoras de Volkswagen se irían a paro técnico por la baja producción.
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