Foto: UEFA
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Real Madrid gana al Sevilla en final de la Supercopa de Europa. Foto: UEFA

Un gol de Dani Carvajal en el minuto 119 dio al Real Madrid su tercera Supercopa de Europa, un título que un atrevido y notable Sevilla acariciaba hasta que Sergio Ramos forzó la prórroga, de nuevo en el minuto 93.

Bien pudo haberse llevado el triunfo el Sevilla, que fue mejor en 90 minutos contra un diezmado Madrid. Acarició la venganza de la derrota hace dos años en Cardiff (Gales) en la misma competición, pero, como en 2015 en Tiflis frente al Barcelona, cayó en la prórroga en un partido lleno de emoción disputado en Trondheim (Noruega).

Asensio al 21′ agarró un balón suelto tras un saque de banda a veinte metros de la portería y sacó un remate colocado con la zurda que se fue al interior de la escuadra de Sergio Rico, que aunque hizo la estatua y creyó que iba fuera, no habría llegado de ninguna manera.

El gol no cambió el desarrollo del partido. El Madrid amenazaba peligro cuando sus mejores hombres combinaban. El Sevilla mantenía el dominio, pero ahora empezaba a acercarse a puerta.

Pero el “Mudo” Vázquez, notable en su debut con el Sevilla, tiró de picardía para aprovechar un control que se le había escapado a Vitolo dentro del área y sacar un remate ajustado al 41′ con la zurda entre una maraña de jugadores, imposible para el portero blanco.

Sevilla acarició la copa

Y al 72′, Konoplyanka puso la balanza a favor de los del Sevilla. En una de las frecuentes subidas por la derecha, Vitolo, cambiado de banda, engañó con un regate seco a Ramos y forzó un penalti ejecutado con sutileza por el extremo ucraniano.

El equipo hispalense tocaba con personalidad, apoyado por los “olés” de su hinchada -la única que se oyó en todo el partido-, pero cuando acariciaba el título, apareció Ramos al 93′ para cabecear a puerta vacía un centro de Lucas Vázquez en la última jugada.

Con uno menos y Pareja tocado, el Sevilla trataba de aguantar y tocar cuando podía, con Konoplyanka casi como único recurso en ataque, confiado en forzar al menos los penaltis.

Pero a un minuto del final, el protagonista más inesperado, Carvajal, hizo un eslalon por la banda que culminó con un remate seco con el exterior, que selló la tercera supercopa para su equipo.

Fuente: EFE