Estados Unidos ha formulado una propuesta de resolución para que el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pueda implementar un embargo de armas a Sudán del Sur que enfrenta un conflicto étnico.
Lo anterior, aconteció luego que Adama Dieng, asesor especial de la ONU para la prevención del genocidio en aquel país declarara ante el Consejo de Seguridad que de no llevarse a cabo acciones de prevención, “el país africano podría enfrentarse a un genocidio”.
Su propuesta es un embargo de armas para evitar un aumento en la violencia, a pesar de ya existir un Acuerdo de Paz celebrado el año pasado.
Hay que precisar que, luego de haber obtenido su independencia en 2011, el país se enfrentó a una lucha entre grupos étnicos cuando en 2013, el presidente Sal Kiir destituyó al vicepresidente Reik Machar derivando enfrentamientos entre quienes apoyaban a ambos líderes políticos.
Un millón de desplazados
Mientras, de acuerdo con datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), el conflicto ha generado el desplazo interno de 1 millón 287 mil 837 personas así como un millón de refugiados en los países vecinos de Sudán, Etiopía, Kenia y Uganda.
Por ello, no es la primera vez que la comunidad internacional solicita se emita un embargo de armas, mismo que no ha sido aprobado debido al veto de Rusia y China —miembros permanentes del Consejo de Seguridad–.
La iniciativa estadunidense se suma al llamado del Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon quien afirmó hace unos días: “Sudán del Sur se encuentra inundada de armas, lo cual convierte en indefensos a los civiles. Debido a dichas circunstancias, detener el flujo de armas es necesario para la protección de los civiles”.
Por ahora, solo queda que la resolución sea discutida y en caso de ser aprobada, el embargo se sumaría a una serie de sanciones ya aplicadas con antelación entre las que destacan; la congelación de cuentas bancarias y fondos que apoyen alguno de los actores del conflicto así como la prohibición de viaje a dicha zona.
