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En Sierra Norte, continúan intimidaciones contra defensores de tierra. Foto: Especial

Defensores de la Sierra Norte de Puebla acusaron que continúan los hostigamientos por oponerse a los megaproyectos, como en del Pahuatlán, como el gasoducto Tuxpan-Tula, cuya empresa a cargo “compra” a autoridades para poder ejecutarlo.

En rueda de prensa, Oliveira Montes, originaria del municipio poblano de Pahuatlán, afirmó que la empresa Transcanada, que ganó la licitación para el gasoducto Tuxpan-Tula, está comprando a jueces de paz y también a ediles de juntas auxiliares para que el proyecto se consolide.

Por ello, destacó que defensores de la tierra estado siendo intimidados por las autoridades con el fin de anular la resistencia, por lo que hizo un llamado a que respeten sus derechos de vivir en un lugar saludable.

Señaló que dicho proyecto afectará 600 hectáreas de bosque, en el que hay 100 pozos de agua, 260 comunidades, semillas y plantas endémicas, así como centros ceremoniales de culturas otom y tutunaku.

“Están fichados”, amenazan

Por su parte, Manuel Sánchez, opositor de proyecto de la Hidroeléctrica Puebla 1 de la empresa Deselec 1-Comexhidro en la cuenca del río Ajalpan, afirmó que se están violando los derechos las comunidades y están tratando de confundir a la población.

Dijo que les envían recados presuntamente de gobierno en donde se les anuncia que ya “están fichados” y culpó a las autoridades de dicha situación, pues recalcó que son ellos quienes han otorgado las concesiones.

Refirió que los están “criminalizando”, pues están siendo acusados de “alborotadores profesionales, siendo que nosotros solo defendemos la tierra”, además de que dijo que les inventan delitos.

Apuntó que, hasta el momento, no ha habido “presos políticos” del lugar, pero comentó que la situación de las comunidades del pueblo tutanaku es un clima “hostil”, por lo que insistió en que seguirá la resistencia.

Reiteró que los megaproyectos en la Sierra Note de Puebla despojan a las comunidades de sus tierras, ponen en riesgo la salud de los habitantes y se dañan los ecosistemas, por lo que se tiene que respetar el derecho de vivir en un ambiente sano.