Por Víctor Flores @literatotanatol
Luego de 14 años construyendo puentes en Puebla, aún no se previenen afectaciones en desagües, como podría ocurrir con el segundo piso de la autopista que, de ser inaugurado sin los tubos, sería una “omisión” grave que pondría en riesgo a automovilistas.
José Salvador Mozo Arista, especialista de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), indicó que Pinfra y OHL deben verificar si la infraestructura cumple con las dimensiones, pendiente y el tubo especificado.
Si lo anterior está en orden, el error es del diseñador, en caso contrario, de la constructora, por lo que en ambos casos se puede demandar, pues automovilistas han denunciado que cuando conducen debajo de la estructura que aún no concluye escurre agua que impide su visión.
Mozo Arista explicó que el segundo piso de la autopista no debe estar todo a nivel, sino que debe haber una “leve” inclinación –pendiente– hacia el centro o a los extremos, con el fin de que el agua se acumule al interior o exterior del puente y, posteriormente, por medio de tubos de PVC, baje hasta el suelo.
“La pendiente más viable es la que recomienda el diseñador porque él está obligado a analizar las opciones de acuerdo con las condiciones de la tierra (…) al parecer, el segundo puente de la autopista tiene la pendiente hacia los extremos, es decir la colección pluvial se hace hacia afuera”, consideró.
El ingeniero en construcción expuso que donde se junta el tubo horizontal –el cual podría encontrarse a lo largo del puente– con el vertical para el desagüe se llama “boca de tormentas”; en este parte, podría ser el caso que no haya el suficiente diámetro lo que ocasionaría que se junta mucho el agua y tiene a caer por otra parte, es decir “en chorro”.
“Como la salida del agua no es constante sino en chorro, hay acumulación en boca de tormentas, puede ser que el agua está calculada para 10 metros cúbicos y llega a 20 en temporada de lluvias y ambientes extremos”, comentó.
Error podría ser “inducido”
Puntualizó que el gobernador Rafael Moreno Valle sólo anunció la construcción del puente a cargo de las constructoras OHL y Pinfra, pero no se dieron a conocer los diseños, por lo cual se desconoce la elevación de las pendientes y, las pulgadas de los tubos.
Sin embargo, recalcó que si no se termina bien se puede demandar por “mal proyecto”, pues este error que han reportado choferes podría ser inducido, con la finalidad de cobrarle más a la administración en turno.
“Pero si el gobierno del estado nada más está esperando que las firmas justifiquen su error para darles más dinero, pues simplemente van a encontrar más errores y buscar obtener más recursos públicos”, afirmó.
Se debe prevenir a usuarios
Por su parte, el ingeniero civil del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (Itesm), Alejandro Pérez Villaseñor, también aseveró que desconoce el diseño del proyecto cuya inversión es de 10 mil millones de pesos, por lo cual consideró “viable” esperar a que se inaugure la obra para evaluar el trabajo terminado.
“El puente del segundo piso de la autopista no se encuentra terminado, sino en etapa de construcción, por lo que se debe esperar a que el proyecto esté completamente listo y funcionando”, apuntó.
Añadió que los puentes tienen a los lados un tipo de “banqueta”, que son las protecciones laterales que impiden que escurra el agua, mismas que –dijo– se construyen al último.
Empero, resaltó que, se debe prevenir a la población que circula por la lateral de la autopista sobre “este tipo de detalles” que surgen durante la edificación y cuando hay lluvias extraordinarias como de esta temporada para evitar accidentes.
Foto: Especial
