Por Tania Damián y Carolina Montero
El exregidor perredista, Arturo Loyola González, dejo entrever que los recursos que se obtienen por el robo de combustible podría estar financiando campañas políticas, pues las pérdidas son de por lo menos de 17 mil millones de pesos anuales.
No obstante, no se refirió a ningún caso y solo reiteró que las autoridades ya deberían saber si dicho dinero podría estar siendo utilizado para financiar campañas de algún político.
Señaló que el robo de combustible se duplicó a nivel nacional de 2012 a 2014 y en lo que va de 2015, la Sedena aseguró 700 camiones con gasolina robada en la región de Tepeaca.
En el país, en 2012 se detectaron mil 620 perforaciones; mientras que en 2013, 2 mil 167; y en 2014 hubo 4 mil 218; lo que significa que durante dicho tiempo se realizaron más de 8 mil perforaciones, sin que las autoridades detengan dicha situación.
Agregó que de acuerdo con algunos medios de comunicación, las pérdidas para Pemex por dicho delito durante el periodo de 2012 a 2014 fueron de 76 mil 200 millones de pesos.
El perredista cuestionó el destino de la gasolina robada y el motivo por el cual las autoridades no identifican a las gasolineras que compran el combustible robado.
Hay complicidad de Pemex
Dijo que robo de combustible “describe con toda crudeza el robo a la nación mexicana y se evidencia de manera cínica la corrupción, la impunidad y la complicidad entre las diferentes esferas y ámbitos del gobierno, del poder judicial y de los mismos directivos de Pemex”.
Criticó a la paraestatal, pues ya debería de haber identificado a las gasolineras con la mayor variación en su demanda de suministro del combustible, para así poder detectar aquellas que puedan estar siendo surtidas con combustible robado.
Además de por qué, en lugar de importar mayores cantidades de gasolina para cubrir el desabasto, no se han adoptado medidas efectivas para evitar el robo en los ductos.
Ante ello, exigió a las autoridades que la problemática sea atendida con prontitud, determinación y responsabilidad, además den una explicación pública de los hechos, por ser un problema de seguridad nacional; además de que los responsables deben ser sancionados “de manera ejemplar”.
Cabe mencionar que en la región de Tepeaca, están los municipios de Palmar de Bravo, Quecholac y Acatzingo.
Foto: Ángulo 7