Espacio cultural de Totimehuacan, amenazado por ejidatarios que buscan venderlo
Espacio cultural de Totimehuacan, amenazado por ejidatarios que buscan venderlo. Foto: Alexis Lira/Ángulo 7
Espacio cultural de Totimehuacan, amenazado por ejidatarios que buscan venderlo
Espacio cultural de Totimehuacan, amenazado por ejidatarios que buscan venderlo. Foto: Alexis Lira/Ángulo 7

El comisariado ejidal de San Francisco Totimehuacan busca vender un predio que contiene un jagüey, hoy centro cultural y natural, que obtuvo tras un despojo por su extitular José Román Aguilar Xilotl, acción en la cual estaría involucrado el exdiputado federal Saúl Huerta Corona.

Así lo indicó Rafael García Salas, dueño legítimo del ejido de ocho hectáreas que obtuvo luego de que su padre se lo heredó en 2009, lugar donde hoy habita con su familia y se encuentra el Centro de Investigación Anahuaca de Sabiduría Ancestral, que sirve como un espacio de difusión cultural.

Contó que el predio lo perdieron en 2019, luego de un conflicto legal que inició en 2006 por el extitular del comisariado ejidal José Román Aguilar Xilotl, quien, de acuerdo con García Salas, lo obtuvo con ayuda de la colusión de las autoridades municipales en ese entonces y con documentos falsos, pues él tiene los papeles en donde acredita que el lugar es de su propiedad.

Señaló que el jagüey “Zoquiaqui” ha perdido hasta el 70 por ciento de su tamaño en los últimos 50 años, producto del crecimiento de la mancha urbana, además de que parte de su área también fue despojada y destruida por el comisariado ejidal y el exdiputado federal Huerta Corona, hoy detenido por presunto abuso sexual.

“Vino (Huerta Corona) con un comisariado, se apoderaron de las tierras donde hoy está el Colegio de Bachilleres, ahí destruyeron parte del jagüey con unos trascabos y 20 mujeres, abriendo la compuerta y dejaron salir el agua por más de 20 días, luego nos dimos la tarea de contratar maquinaria y taparlo”, contó.

Aunque el fallo no fue a favor de su familia, siguen viviendo ahí, ya que sólo se quedó con media hectárea, pero el resto aún lo habita y lo usa para el centro cultural.

En meses recientes, agregó, ha visto cómo personas desconocidas entran al predio con la intención de comprarlo y construir casas habitacionales, acción que no ha permitido, además de que vive con la incertidumbre de que cualquier día sea retirado del lugar, amenazando al centro de investigación que ha construyó desde hace 40 años, único en la zona y en la capital poblana.

Por ello, García Salas pidió a los gobiernos municipal, estatal y federal intervenir para que no se pierda este centro cultural.

Cabe señalar que no es la primera vez que Huerta Corona se ve involucrado en un caso de despojo, ya que, en abril pasado, vecinos de la misma junta auxiliar denunciaron ante el ayuntamiento que su hermano Octavio Huerta Corona, intentaba quitarles su predio de 90 metros.

Espacio natural y cultural

El Centro de Investigación Anahuaca de Sabiduría Ancestral está ubicado en la calle Benito Juárez, el cual recrea espacios ceremoniales, tumbas, temazcales, campo de juego de pelota, murales en relieve, esculturas y un “Tzompantli” o muro de cráneos.

El lugar, conocido popularmente por “Los temazcales” por los vecinos, es un espacio amplio y natural, lleno de árboles de diversos tipos, además de ser habitado por animales como ranas, pelícanos, patos, pescados, xoloescuincles y axolotes.

Las diferentes actividades que se ofrecen como las ceremonias de temazcal, el primer sábado de cada mes; un tianguis de trueque, danzas tradicionales, prácticas de curación con plantas medicinales, además de que es sede, cada cuatro años, del Encuentro Ceremonial Ancestral Tradicional.

Es importante resaltar, que en el lugar se impulsa la conservación de comidas tradicionales como las tlatlapas, caldo de piedra, quintoniles, alaches, entre otras.

El espacio es un lugar importante para la comunidad y para los poblanos que visitan el lugar diariamente, además por las especies y flora que aún prevalece.

R: DJ

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