El gobierno federal señaló, en su tercer informe del año, que la política exterior del país, a cargo de la SRE, tiene como políticas principales el fomento de la cooperación para el desarrollo, así como el combate al tráfico de armas desde Estados Unidos.
De acuerdo con el documento presentado por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, el pasado 1 de septiembre, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), dirigida por Marcelo Ebrard Casaubón, busca establecer una nueva estrategia de seguridad con el país vecino del norte.
En el contexto de la pandemia por Covid-19, la SRE ha promovido la cooperación entre países de América Latina, como con Argentina y que resultó en el acuerdo para envasar las vacunas de AstraZeneca, además de que ha donado 150 mil dosis de vacunas a Paraguay, 100 mil a Belice y 150 mil a Bolivia, 100 mil dosis a El Salvador, 150 mil a Honduras y 150 mil a Guatemala.
Asimismo, ha exigido ante instancias internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la aceleración del programa Covax, para otorgar antígenos a países pobres.
La cooperación que la dependencia ha buscado no se reduce al ámbito de la salud, sino también a la recuperación económica, subrayando, ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que el rescate económico debe hacerse de “abajo hacia arriba, empezando por ayudar a los pobres”, así como evitar el endeudamiento, sobre todo si es para el beneficio de unos cuantos.
Como consecuencia, el país ha realizado diversos proyectos de cooperación con países de los cinco continentes del mundo, dando prioridad a la región Latinoamérica y buscando una mayor con la asiática.
Nueva política de seguridad y combate al tráfico de armas
Otro punto importante que la SRE como dependencia encargada de la política exterior ha realizado es la búsqueda de una nueva política de seguridad con Estados Unidos, resaltando los esfuerzos contra el tráfico de armas hacia nuestro país, así como contra la trata y tráfico de personas.
Al respecto, dicha petición avanzó en foros multilaterales para prevenir y frenar el tráfico ilícito y el desvío del comercio de armas y municiones, visibilizando las consecuencias de las armas en la violencia, criminalidad y pérdida de vidas.
También ha impulsado, en la Asamblea General de la ONU, el desarme y la no proliferación de armas de destrucción en masa, mediante su participación en alrededor de 80 reuniones multilaterales en la materia.
Atención de las causas de la migración para reducir el flujo
En conjunto con otras dependencias, se implementó el Plan de Desarrollo Integral (PDI) con El Salvador, Honduras y Guatemala, el cual busca reducir el flujo migratorio mediante la ampliación de los programas Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro.
Asimismo, la gestión migratoria de la Federación busca fortalecerse con la consolidación de las operaciones de la Comisión Intersecretarial de Atención Integral en Materia Migratoria, a través del cual se busca dar respuestas a las complejidades del fenómeno.
Las acciones al respecto tienen como fin generar las condiciones para que la migración sea voluntaria y no por necesidad, por medio de la creación de vías institucionales para que ésta sea ordenada, segura y regular.
Mientras que el Operativo Plan de Desarrollo Fronteras Norte y Sur tiene la finalidad de disminuir la comisión de ilícitos relativos al tráfico de personas, contrabando de mercancías y actividades de narcotráfico.
Relación de entendimiento con EU
La relación con el país vecino del norte y el presidente Joe Biden, electo este año, se ha centrado en ser de entendimiento, sobre todo en los temas más importantes para ambas naciones, como la migración, cooperación y seguridad.
Con la administración estadounidense se acordó impulsar la recuperación económica; fortalecer los flujos de inversión extranjera hacia México; atender las causas estructurales de la migración, respetando los derechos humanos; e impulsar los derechos laborales.
