Razón de números
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que para quienes cuestionan por qué Marko Cortés Mendoza permitió que Genoveva Huerta Villegas pusiera las estructuras y órganos del Comité Directivo Estatal del PAN a su favor, con el inequívoco propósito de prolongar su gestión por tres años más, solo hay checar el tamaño de las reuniones que este lunes tuvo con diferentes grupos panistas en los salones del MM Gran Hotel de Las Ánimas, y la cantidad de firmas de apoyo que cada uno de estos le entregó.
El grupo que más firmas de apoyo recolectó para Marko Cortés fue el de Genoveva Huerta, que tiene como principales protagonistas a los diputados electos Eduardo Alcántara Montiel, Carolina Beauregard, Oswaldo Jiménez López y Mónica Rodríguez Della Vecchia. En total le aportó 5 mil 249, mismas que pueden corroborarse en la plataforma digital del candidato.
En la misma plataforma aparecen otras 879 firmas de panistas poblanos que corresponden a las reunidas por los grupos de Rafael Micalco Méndez, Mario Riestra Piña, Edmundo Tlatehui Percino y Jesús Zaldívar Benavides y Eduardo Rivera Pérez.
De todas las reuniones que sostuvo Cortés Mendoza en diferentes salones del MM Grand Hotel, la más numerosa, que reunió a unos 250 comensales, fue la del grupo de Genoveva Huerta, quien llegó por la noche en compañía de integrantes de su comité, como María del Rosario Contreras Lara, secretaria de Promoción de la Mujer, a pesar de supuestamente las autoridades partidistas tendrían que actuar con imparcialidad durante la contienda interna.
Otra reunión la encabezaron el dirigente municipal en Puebla, Jesús Zaldívar Benavides, y el presidente municipal electo de San Andrés Cholula, Edmundo Tlatehui Percino, quienes juntaron en otro salón a no más de 50 militantes, entre ellos algunos de vieja trayectoria como Guadalupe Montejano, mejor conocida Lupita de la Torre (viuda de Pedro de la Torre), Héctor Vera Arenas y Arturo Carranco Blanca.
Por beneficiar negocio de un hermano, rectora de Tecamachalco ordenó el regreso a clases de todos los alumnos al mismo tiempo
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que mientras en todo el sistema educativo poblano el retorno a clases presenciales fue escalonado, voluntario y evitando aglomeraciones, ha llamado la atención que en la Universidad Tecnológica de Tecamachalco (UTT) se dio la orden tajante del regreso a las aulas de todos los alumnos, en horarios extendidos y sin restricciones para evitar contagios de Covid-19. Se sabe que esa determinación no obedeció a ningún criterio académico o alguna estrategia epidemiológica, sino al simple deseo de favorecer la recuperación económica de la Cafetería Central de la institución, pues es una política prioritaria de la UTT –aunque parezca exagerado—eliminar los competidores de ese negocio.
Un negocio que tendría como principal beneficiario a Justo Fernández Patricio, el hermano de Karina Fernández Patricio, la rectora de la UTT, que ha convertido esa concesión en un lucro familiar.
Y aunque pueda parecer un escándalo menor no lo es –de los tantos alborotos que ha enfrentado la polémica rectora de la UTT—, pues ha sido fuente de abusos contra alumnos y personal administrativo, ya que algunos trabajadores se contagiaron de Covid-19 por la obsesión de los directivos de que todos los días se tiene que consumir bebidas y alimentos en esa cafetería.
Gali contrata vocero (Lozano)
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, indica que Javier Lozano Alarcón, expriista, exzedillista, expanista, excalderonista, exmorenovallista, es el defensor de oficio de los impresentables.
Fue vocero de José Antonio Meade en el 2018, luego de renunciar al PAN en protesta por la designación de Ricardo Anaya. Él, su partido y candidato acabaron en el tercer lugar de la votación.
Por horas, ostentó el cargo de vocero de la Coparmex, ahora defiende al impresentable gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Y todo apunta a que acaba de ser contratado para defender al exgobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad, con el propósito de atacar al mandatario morenista Luis Miguel Barbosa.
Hace a un lado argumentos, para emplear epítetos y alusiones personales que sólo exhiben a quien los eructa.
El lucro político con la “educación”
Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que por fin, una autoridad electoral toma medidas en contra del uso electoral que el Partido del Trabajo le ha dado históricamente a los Centros de Desarrollo Infantil.
El INE ha decidido aplicar una multa a este instituto político por 119.8 millones de pesos por el desvío de recursos públicos que el gobierno de Nuevo León le otorgó a los tristemente célebres CENDIS.
Lo usaron para todo, menos para el tema educativo.
Una mina de oro que ha sido destinado, además de para fines políticos, también para el enriquecimiento personal de Alberto Anaya, su familia y secuaces, dueños absolutos de la franquicia.
En el 2017, la Procuraduría General de la República demostró que el propio Anaya, su esposa y otros incondicionales, lavaron más de 100 millones de pesos entregados también, por el gobierno de Nuevo León, para la operación de estos centros.
MV las siglas que pagamos a precio de oro
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que con el informe de la CMIC que ayer se reveló, fueron ratificadas las denuncias que en su momento realizó Intolerancia Diario sobre los tirantes de ornato que mandó colocar Rafael Moreno Valle a los puentes viales.
Los metales que formaban las iniciales del exgobernador, además de ser una oda a su apellido, también representaron un gasto suntuoso e innecesario para los poblanos, a quienes ni nos preguntaron si nos gustaban.
Con el informe de la CMIC, las advertencias de las investigaciones y hasta el castigo a quienes autorizaron y pagaron esas obras faraónicas regresaron, lo cual continúa como una demanda social.
Lo increíble es que al iniciar la legislatura que está por dejar el Congreso, justamente escribí una lista de las muchas cosas en las cuales Moreno Valle había derrochado millones de pesos del erario, sin embargo, tres años después ni los lopezobradoristas, ni la oposición propusieron una comisión que investigara el desfalco, que se realizó durante el sexenio morenovallista.
Tláloc en Puebla y el olvido de AMLO