A tres días de haber sido secuestrado, junto con dos mujeres, Gilberto Tapia Mendoza, trabajador del programa Sembrando Vida, fue localizado sin vida el sábado por la mañana en el municipio de Coyuca de Catalán, Guerrero, confirmaron familiares.
Este domingo, los deudos dieron a conocer que el cuerpo del joven fue hallado sobre la carretera que conecta el balneario de Zihuatanejo y el puerto de Acapulco, y pidieron el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador para que el crimen no quede impune.
Lo anterior, a través de la cuenta de Facebook “Te queremos de regreso Gilberto”, que crearon para dar a conocer el secuestro de Gilberto y pedir ayuda a la población para localizarlo.
De acuerdo con la información difundida, Tapia Mendoza era padre y originario del poblado El Mameyal, Petatlán, de donde fue desplazado junto con su familia por la violencia.
Un familiar comentó a medios guerrerenses que el cuerpo presentaba signos de tortura y disparos de arma de fuego.
En tanto, también trascendió que las dos mujeres que fueron secuestradas con Gilberto también eran trabajadoras de Sembrando Vida, y fueron liberadas luego de dos días.
Responsabilizan a comisario ejidal
El pasado viernes, el Secretario de Ejido de Guajes de Ayala, Javier Hernández, denunció el secuestro de tres jóvenes del programa Sembrando Vida.
El funcionario informó que solo cinco, de ocho beneficiarios, llegaron a Guajes de Ayala, mientras que tres de ellos fueron detenidos en El Durazno. Las otras dos personas detenidas, dos mujeres jóvenes, fueron localizadas con vida.
Los familiares de la víctima responsabilizan a la comisaría municipal del Durazno, Mari Flor Chávez Tello, y al coordinador del programa federal, Alejandro Tapia, por el crimen, de acuerdo con información del periódico El Sur.
LPR