Luis Crescencio Sandoval González, titular de la Sedena, aclaró que no intervino en la masacre de Allende, en Coahuila, ocurrida en 2011, pues se encontraba en una guarnición, en Piedras Negras, que atendía lo administrativo y no lo operativo.
En la conferencia de prensa matutina, agregó que se hizo cargo de dicha guarnición el 18 de marzo de 2011, justo cuando se presentaron los hechos de violencia, donde sólo había 22 elementos administrativos, pero no había tropas.
Expresó que en ese momento se le asignó la atención de un incendio que inició en el municipio de Acuña y finalizó en Múzquiz, por lo que fue el responsable de las labores de sofocarlo.
Manifestó que hace diez años la presencia de tropas era muy reducida, pues únicamente se contaban con mil 500 elementos para cubrir todo el territorio de Coahuila.
Refirió que él no era el responsable directo de esa zona, sino el comandante, además de que para que el Ejército pudiera intervenir en asuntos de seguridad pública tenía que existir una petición del gobernador a la Secretaría de Gobernación (Segob), lo cual ya se modificó.
El secretario de la Defensa Nacional (Sedena) puntualizó que fue hasta ocho meses después de que se hizo cargo de la guarnición de Piedras Negras que fue el responsable de la parte operativa, como parte de la Operación Noreste.
Cabe recordar que del 18 al 20 de marzo de 2011, miembros del cártel de los Zetas arribaron a Allende donde quemaron casas y se llevaron a familias enteras para luego asesinarlas, debido a conflictos internos de la organización.