CONFERENCIAS EXCLUSIVAS Alfredo Jalife
Las vacunas contra Covid-19 de AstraZeneca y Pfizer, que fueron las primeras por las que México apostó desde la Secretaría de Salud, se perfilan como “perdedoras” tras un año de la pandemia, pues su cotización en bolsa se desplomó y son poco efectivas ante las nuevas cepas.
En su análisis semanal “Rada Geopolítico”, publicado en YouTube, Alfredo Jalife-Rahme, especialista en geopolítica señala la existencia de “ganadoras” y “perdedoras” entre la diversas vacunas desarrolladas en el mundo.
Con base en datos de la bolsa de valores de Nueva York, el académico señala que el valor de la vacuna de la farmacéutica estadounidense Pfizer, elaborada en colaboración con la alemana BioNTech, tuvo una caída del nueve por ciento desde marzo de 2020.
Por su parte, las acciones de la vacuna del laboratorio anglosueco AstraZeneca cayeron -3.24 por ciento en el mismo periodo, pese a salir al mercado con una amplia campaña de publicidad.
En contraste, las acciones de las vacunas de Novax y Johnson and Johnson se han disparado a más del doble y casi 50 por ciento, respectivamente, en un año.
Mayores contratos de México, con estas vacunas
En 2020, México firmó sus primeros contratos de compra de vacunas con AstraZeneca, por 77.4 millones de dosis, y después con Pfizer, por 34.4 millones. De estas cantidades, ha recibido menos del 25 por ciento a la fecha.
El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, vocero de la estrategia contra Covid-19 y consultor del gobierno en cuanto a compras de vacunas, fue uno de los impulsores de las precompras de dichas vacunas.
En contraste, expresó reservas sobre la efectividad de la vacuna rusa Sputnik V. Sin embargo, a inicios de este 2021, terminó por avalar una compra de 24 millones de dosis, esto por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador ante el suministro intermitente de las vacunas de Pfizer y AstraZeneca.
Las gestiones para cerrar los contratos con las farmacéuticas estadounidense y anglosueca también se agilizaron desde la Secretaría Relaciones Exteriores (SRE), encabezada por Marcelo Ebrard Casaubón.
Baja efectividad ante nuevas cepas
Entre los factores que han hecho que dichas vacunas pierdan confianza en los mercados, Jalife-Rhame señaló que ambas no han sido efectivas ante las “preocupantes” mutaciones del virus, como la brasileña y la sudafricana.
Asimismo, tiene una percepción negativa que ambas han provocado efectos alérgicos en pacientes. Y que, en el caso de Pfizer, se precise de temperaturas muy bajas para conservar el antígeno.
En el plano internacional, el especialista subrayó que las vacunas de AstraZeneca y Pfizer se encuentran en cuarto y décimo lugar mundial en su camino a la aprobación por parte de la Organización Mundial de la Salud, por detrás de las tres vacunas chinas que van en los primeros lugares.
Jalife-Rahme también criticó que, en la compra de vacunas, no se esté tomando en cuenta los factores de efectividad contra las nuevas cepas y durabilidad, que serán determinantes para ver los efectos a largo plazo.