En octubre, Emmanuel compró un celular usado que su jefa le ofreció, el cual vendió a su hermana Fanny, sin embargo, fueron detenidos porque el aparato estaría involucrado en varios delitos; en protesta en Tehuacán, familiares acusaron que la FGE les está fabricando delitos.
De acuerdo con Olga, la madre de los hermanos Romero Ramírez, los hechos se remontan a octubre pasado, cuando el 14 de ese mes ambos fueron detenidos acusados de cohecho, además de que el teléfono estaba involucrado en otros delitos.
La primera audiencia se llevó a cabo el 18 de octubre, en Tecamachalco, donde el defensor afirmó que ellos iban a salir, lo cual pasó, pero los hermanos fueron reaprehendidos presuntamente porque el teléfono celular pertenecía a una mujer hallada sin vida.
Ahora, los hermanos están acusados de homicidio en grado de tentativa contra servidores públicos, cohecho y el robo de un teléfono celular, por lo que los familiares acusan que la Fiscalía General del Estado (FGE) les ha fabricado pruebas para “entregar resultados”, al tiempo de acusar diversas irregularidades en el caso.
Olga acusó que sus hijos estuvieron incomunicados tras ser detenidos, además de que se les imputaron varios delitos sin las pruebas suficientes, por lo que en una marcha realizada la tarde de este lunes pidieron la intervención del gobernador Miguel Barbosa Huerta en el caso.
En la protesta, participaron familiares y amigos de los detenidos, quienes llegaron a la Casa de Justicia de Tehuacán para alzar la voz ante las presuntas irregularidades y, tras algunos minutos, bloquearon la avenida Adolfo López Mateos, en espera de ser atendidos por alguna autoridad.