Con la Guía Ética para la Transformación de México, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador busca difundir 20 principios y valores que fundamentan su proyecto para “construir una sociedad más justa y más igualitaria” y hacer frente a la “crisis de valores”.
Este jueves, durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario presentó el pequeño manual de 34 páginas, el cual se planea distribuir entre beneficiarios de la pensión de adultos mayores, para que ellos a su vez lo compartan con sus familias.
“Este documento se va a imprimir en una cantidad considerable, se les va a hacer llegar a 8 millones de adultos mayores para que sean ellos los que, si así lo desean, si están en condiciones de hacerlo, transmitan y analicen con sus hijos, con sus nietos, lo que se dice en esta guía”, indicó el mandatario.
El documento fue redactado por un equipo de “expertos”, entre ellos algunos funcionarios federales: Enrique Galván Ochoa, Pedro Miguel, José Agustín Ortiz Pinchetti, Jesús Ramírez Cuevas, Margarita Valdés González Salas y Verónica Velasco Aranda
En el prólogo, los autores reiteran el señalamiento de que “el régimen neoliberal oligárquico” fue el causante de la “descomposición y la decadencia a la que México fue conducido”, pues priorizó valores como “la competitividad, la rentabilidad, la productividad y el éxito personal en contraposición a la fraternidad y a los intereses colectivos”.
Plantean principios éticos tradicionales y nuevos
En contraste, plantean reafirmar “los principios éticos hasta hace poco menospreciados y ridiculizados en el pasado reciente (…) así como incorporar y fortalecer otras normas de conducta que han ido surgiendo”.
Entre los 20 principios, están por ejemplo, el respeto a la diferencia, la vida, la dignidad y la libertad, cada uno encabezada por sentencias como “Evitemos imponer “nuestro mundo” al mundo de los demás”; “No hay nada más valioso que la vida, la libertad y la seguridad de las personas”; “No se debe humillar a nadie”, y “La paz y la libertad son inseparables. Nadie puede estar en paz sin libertad”.
También resalta el principio de “redención”, donde se plantea que “desde una perspectiva humanista, los criminales y corruptos pueden redimirse por medio de la reflexión, la educación e incluso la terapia psicológica, sin renunciar, desde luego, por la seguridad de la sociedad y por motivo de justicia, a la posibilidad”.
Al hablar de la familia, se reitera la idea de que “la familia es la principal institución de seguridad social de México”, además de reconocer que es “una unidad muy variable y sin un modelo único, en el que “pueden caber una sola persona o muchas, individuos con o sin parentesco sanguíneo o matrimonial, del mismo sexo o sexo diferente”.