Adelanto del primer informe del gobernador Barbosa
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que no lo cuente en voz alta, pero el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta ha planeado, en el marco de su primer informe de labores, anunciar la aprehensión de algunos ex funcionarios muy relevantes de los gobiernos de Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad, a los que su administración acusará de peculado, lavado de dinero, delincuencia organizada y otros delitos.
Según los enterados, el Ejecutivo tiene previsto dedicar una buena parte de su informe al compromiso de la 4a Transformación de Puebla con el combate a la corrupción y a la impunidad, y ese contexto anunciar la detención de algunos ex secretarios de los gobiernos morenogalistas sobre los que ya existen investigaciones y procesos abiertos.
Esta estrategia del gobernador Barbosa y sus asesores de origen chiapaneco tiene como origen algunos procesos penales en los que ha venido trabajando el abogado Florencio Madariaga Granados a partir de investigaciones sobre los bienes patrimoniales y los movimientos bancarios y financieros de los posibles acusados, y declaraciones de algunos testigos que los han incriminado.
El informe del gobernador Miguel Barbosa debe realizarse, de acuerdo con el artículo 53 de la Constitución Política del estado, dentro de los primeros quince días del mes de diciembre del primer Periodo de Sesiones Ordinarias de cada año en el Congreso.
Así las cosas, los ex funcionarios morenovallistas y galistas están a tiempo de ir tramitando amparos o de fugarse, y los de la 4T de planear otra estrategia por sí ésta que ya trascendió se arruina o se les viene abajo.
Mario Delgado le entrega el control de Morena Puebla a Alejandro Armenta
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que de manera sorpresiva, mediante un video, el nuevo presidente nacional de Morena, Mario Delgado, apareció con Edgar Valentín Garmendia de los Santos y le dio el espaldarazo como dirigente esta fuerza política en Puebla. Más allá de lo desaseado que resulta definir a un directivo sin tener el consenso de otros sectores morenistas, lo que representa esa comunicación es que se le está entregando el control del partido al senador Alejandro Armenta Mier. Un movimiento que viene a dañar la cohesión e institucionalidad de dicha agrupación.
Garmendia es un personaje sin liderazgo y sin arraigo en las bases de Morena. Su único mérito es que es un operador de los intereses políticos de Alejandro Armenta Mier desde que el segundo dejó las filas del PRI y se pasó a la 4T.
Desde hace unos días en esta columna se había advertido, con base a los depósitos de BBVA, que en septiembre la nómina del partido se había dejado de utilizar para pagar a los trabajadores de Morena y ahora la mayor cantidad de recursos se emplean en salarios a favor de tres operadores de Armenta, que tienen cargos en la estructura política de dicho instituto. Con ello, se rompió con la tradición morenista de que no se sufragaban los sueldos de los directivos.
Proyecto para lavar
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, indica que el litigio iniciado por el gobierno de Luis Miguel Barbosa para recuperar el predio regalado desde el sexenio de Melquiades Morales al Consejo Coordinador Empresarial, exhibirá que el sector privado sólo hace negocios de saliva.
El nuevo estilo de vida de los negocios en Puebla con My Residence pasó de sueño a pesadilla, pues hubo especulación con la tierra y lavado de dinero.
Sólo quedó el hoyo en una extensión de 67 mil metros cuadrados, mientras los patrones, eso sí, andan más en la grilla contra la 4T.
Todas las calamidades se conjuntaron en ese maldito terreno donado en 2004 por el entonces gobernador Melquiades Morales Flores y partido a la mitad por el ex mandatario Rafael Moreno Valle.
Los inversionistas virtualmente se retiraron del proyecto que se supone “presupuestó indebidamente la corrida financiera”. Requería en 2015 una capitalización de 90 millones de dólares, pero para el 2020 cuesta el triple.
El fracaso de los superdelegados
Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que iban a ser auténticos virreyes en sus estados.
Personajes poderosos que tenían la misión de sentar las bases de la Cuarta Transformación de la Vida Pública Nacional a lo largo y ancho del país.
Los alfiles perfectos, mimetizados muchos en la figura de Andrés Manuel López Obrador, que llevarían bienestar y mejores condiciones de vida a este pueblo bueno y sabio que se decantó por un cambio radical en la forma de hacer política en México.
Su encomienda principal era la de hacer honrar aquella romántica frase, pieza central del eje discursivo del actual gobierno y que reza aquello de que “por el bien de todos, primero los pobres”.
Pero ya en los hechos, hicieron todo lo contrario.
Fueron primero ellos, luego ellos y hasta el ultimo, también ellos.
La inútil bancada poblana en San Lázaro
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que durante la madrugada del miércoles, los diputados federales aprobaron un presupuesto que más que una repartición equitativa del gasto, es la firma de un cheque en blanco para que el Tlatoani cumpla sus caprichos.
Es increíble que todos los estados y en general, todo el país, tengan que apretarse el cinturón para pagar los caprichos del viejito necio como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas o el aeropuerto de Santa Lucía.
En términos reales, entre lo que se gastará este 2020 y lo que se va a destinar para 2021 sólo hay una diferencia de -0.3 por ciento. Básicamente la hacienda nacional considera los mismos pesos y centavos que el año pasado y eso que diputados de la oposición acusaron que se trataba de un presupuesto por demás “optimista”.