Ante la pugna por la dirigencia nacional de Morena, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que las encuestas son la mejor forma de “recoger los sentimientos de militantes” si se hacen con buena estratificación en la escala social y no se “cucharean”.
Lo anterior, durante su conferencia de prensa matutina, ante la pregunta de la prensa sobre su postura respecto a la encuesta de desempate que definirá quién, entre Porfirio Muñoz Ledo y Mario Delgado Carillo, se queda con la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena, partido que el mandatario fundó.
“Pues se vuelva a hacer (la encuesta abierta), como lo están proponiendo las autoridades, en este caso creo que es el INE, porque puede cambiar, dado que ya no van a participar todos, creo que ya son dos o tres nada más”, expresó.
Destacó que las encuestas se basan en un “método científico”, pero “lo malo es cuando sesgan el resultado por intereses, cuando ni siquiera hacen las encuestas, cuando las cucharean (…) o la muestra la hacen para tener la opinión sólo de un sector o de una clase, o la opinión mayoritaria de una clase o de un sector, cuando no hay una buena estratificación”.
En el caso de México, afirmó que se debe “preguntar más abajo porque son más los pobres, es un sistema piramidal (…) Si son mil 200 cuestionarios, tienen que aplicarse 800; luego lo que corresponde a la clase media, clase media baja, clase media-media, clase media alta, y luego arriba”.
Dirigente no debe dejarse manipular
El mandatario relató que, cuando fue dirigente del PRD, no tuvo problemas mayores con las encuestas e incluso aseguró que la candidatura presidencial de 2012, por la cual contendían él y el ahora canciller Marcelo Ebrard Casubón se definió mediante este método.
“Marcelo aceptó el resultado. Se puso cera en los oídos para no escuchar el canto de las sirenas, porque mis adversarios querían que nos peleáramos”, destacó.
En este sentido, remarcó que los dirigentes no deben dejarse manipular por los “lambiscones” y “zalameros” que liente a conflictos.
“Entonces, siempre hay los que cucan, sonsacan. ‘Pero ¿cómo no vas a ser tú?, si tú tienes más méritos, si tú tienes más tiempo en la militancia, si tú hablas de corrido’. Siempre hay los que dan cuerda, pero eso depende de la responsabilidad del dirigente”