El suicidio se ubicó como la cuarta principal causa de mortalidad en niños y adolescentes de entre 10 y 17 años con 641 decesos a nivel nacional durante 2018, solo por debajo de accidentes (mil 697), agresiones (mil 199) y tumores malignos (977).
Así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) que compartió datos a propósito del Día Mundial para la Prevención del Suicidio que se conmemora cada 10 de septiembre.
El 60 por ciento (383 muertes) de las lesiones autoinfligidas en los menores de edad durante 2018 correspondieron a hombres y el 40.2 por ciento (258 muertes) a mujeres.
Los datos del Inegi indicaron que 9 de cada 10 fallecimientos por lesiones autoinfligidas, de niñas, niños y adolescentes de 10 a 17 años (88 por ciento), fueron por ahorcamiento, estrangulamiento o sofocación. Le sigue el envenenamiento (6 por ciento) y el disparo con arma de fuego (3 por ciento).
Añadió que en México, para 2018 sucedieron 641 suicidios en menores de entre 10 a 17 años, lo que representó una tasa de 3.6 fallecimientos por cada 100 mil menores de edad, situación que ha permanecido prácticamente sin cambios desde 2014 donde se encontraba en 3.7.
Por sexo, la tasa en hombres de 10 a 17 años se encuentra en 4.2 por cada 100 mil menores de entre 10 y 17 años, mientras que, para las mujeres de este grupo de edad, fue de 2.9 por cada 100 mil.
67 mil suicidios de menores en el mundo
El suicidio es definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un problema grave de salud pública, que tiene la cualidad de ser prevenible. Para ello es necesario no solo atender los casos de depresión o intentos de suicidio, sino implementar estrategias para la detección temprana de posibles riesgos.
Para las niñas, niños y adolescentes atentar contra su vida no significa un simple deseo de morir, sino que se da como un recurso final para escapar de un gran malestar. Los menores de edad se encuentran vulnerables a diversos cambios que pueden afectarles: hormonales, incremento de responsabilidades, crisis familiares, entre otros. Es por ello que no se puede hablar de una sola causa y en ocasiones ciertos eventos solo ocurren como detonantes.
A nivel mundial, el fallecimiento por lesiones autoinfligidas fue la tercera causa de muerte en adolescentes en 2015, con 67 mil casos.
Cabe mencionar que en el caso de Puebla, en el primer semestre de 2020, el Instituto para la Gestión y Vinculación Municipal (Igavim) registró 38 suicidios el 84 por ciento ocurrió durante marzo a junio, periodo del confinamiento por la pandemia a causa del Covid-19.
