El gobierno del estado no tiene registro de agresiones a personal de salud durante la pandemia del Covid-19, aunque no se descarta que se hayan presentado, lo que ya es considerado como un delito tras la reforma aprobada en el Congreso local.
En rueda de prensa, este martes, el director de Salud Pública y Vigilancia Epidemiológica, José Fernando Huerta Romano, comentó que al menos dentro de la Secretaría de Salud (SS) no se han reportado quejas por parte de personal médico o enfermeras.
Sobre el tema, el gobernador Miguel Barbosa Huerta manifestó que aunque en un principio se dio a conocer en el país cierto rechazo, aunque después se dio un reconocimiento generalizado a estos trabajadores, incluidos los de Puebla por desempeñar su labor ante la emergencia sanitaria.
“Eso que se dijo del Covid de que había un rechazo en las calles o en algún lugar público al personal de salud por contagio, no dudo que haya ocurrido hasta en Puebla, aunque no tenemos un registro oficial de ello”, pronunció.
Sin embargo, señaló que ante esta situación se dio una reforma en el Congreso local en mayo pasado para castigar esta conducta y sancionarla como un delito, a fin de evitar que se den agresiones a los trabajadores de este sector, ya sea médico, enfermeras, administrativos, entre otros.
Congreso aprobó sanciones en mayo
Dicha legislación se basó en modificar el artículo 357 del Código Penal del estado, en el que se estableció que se puede imponer una pena de hasta 6 años de prisión a toda aquel que ataque, ya sea de manera física o con algún tipo de líquidos, a personal de la salud.
“Hoy son héroes, después de meses su sacrifico tiene el reconocimiento del gobierno en sus tres órdenes y de la sociedad, y desde luego desde aquí nuestro agradecimiento al personal de salud que se ha fajado en los hospitales, unidades médicas y demás instituciones”, expresó Barbosa Huerta.
Es necesario precisar que, en julio pasado, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), informó que, del periodo del 19 de marzo al 9 de junio, recibió 343 quejas de actos discriminatorios relacionados con la enferemedad Covid-19, de las cuales siete fueron de Puebla, lo cual ubico al estado en el noveno lugar nacional.
