Semarnat rechaza 19 solicitudes para sembrar algodón transgénico
Semarnat rechaza 19 solicitudes para sembrar algodón transgénico. Foto: agrobio.org
Semarnat rechaza 19 solicitudes para sembrar algodón transgénico
Semarnat rechaza 19 solicitudes para sembrar algodón transgénico. Foto: agrobio.org

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) emitió, durante 2019, dictámenes vinculantes negativos para 19 solicitudes de siembra de algodón genéticamente modificado, por riesgos ambientales y omisión de realizar consultas indígenas.

A través de comunicado, la dependencia refirió que estos veredictos tienen fundamento en la determinación de los riesgos señalados en los artículos 15 y 66 de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM), así como en la consulta indígena establecida en el artículo 108 de la misma.

Esta decisión no implica ni suspende la producción de algodón GM en México, pues actualmente los promoventes cuentan con 22 permisos de liberación en etapa comercial, conforme a la LBOGM, que abarcan una superficie de más de 1.5 millones de hectáreas con permisos en fase comercial.

Estas autorizaciones, que fueron otorgadas en la administración anterior, están vigentes y no requieren nuevos trámites.

En lo que respecta a la consulta indígena de las 19 solicitudes negadas por la Semarnat, que establece la ley mencionada, detalló que el 66 por ciento de la siembra de algodón GM se lleva a cabo en Chihuahua, un estado con fuerte presencia indígena.

Otras solicitudes son para los estados de Chihuahua, Baja California, Coahuila, Durango, Tamaulipas y Sonora, que también tienen presencia indígena en la vecindad de las siembras. Lo anterior, además de estar asentado en la ley, fue resuelto por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el caso de la soya transgénica.

Algodón transgénico pone en riesgo especies silvestres

La dependencia expuso que la existencia de transgenes en poblaciones silvestres de algodón pone en riesgo la estructura genética de G. hirsutum y de sus parientes silvestres, en momentos en el que la conservación del reservorio genético es crucial ante diferentes retos, como el cambio climático.

La dispersión de transgenes, sea por dispersión no intencional de semilla o por flujo génico, es una evidencia de que no se cumplieron las medidas de bioseguridad ni la vigilancia en el monitoreo establecido.

Otra inconveniencia del cultivo de algodón GM es la dependencia del uso de un paquete biotecnológico que integra la utilización de glifosato y otros herbicidas peligrosos para la salud y que contaminan el ambiente como el glufosinato de amonio.

Por todo ello, la Semarnat considera que es momento de evaluar la pertinencia de los cultivos transgénicos frente a la responsabilidad de proteger el reservorio genético que nuestro país alberga, así como evaluar lo más conveniente para México.