Habitantes de la ciudad de Puebla se mostraron a favor de que el gobierno estatal decidiera no reanudar actividades el 1 de junio, incluido el regreso a clases; reprobaron que algunos poblanos siguen sin acatar medidas de protección y sana distancia.
Así lo manifestaron a Ángulo 7 tres personas, quienes coincidieron en que también es responsabilidad de los ciudadanos acatar las normas para evitar que la recuperación de actividades se retrase.
Diego, un profesor de 34 años, comentó que es necesario evitar el regreso a clases hasta que no haya una considerable disminución en la curva de contagios, pues mencionó que, al menos en su escuela, sería riesgoso exponer a los niños a un posible brote del virus.
Esto, ya que destacó que en la primaria donde labora, ubicada en la colonia Tlilostoc, tan solo en un salón cuenta con alrededor de 50 alumnos, en tanto que los 17 grupos restantes comparten casi la misma matrícula.
Opinó que la gente debería “evitar salir”, ya que ha observado que, pese a las restricciones de acceso en supermercados, hay personas que deciden esperar afuera a su familiar, acompañados de niños, provocando un acumulamiento de gente que impide la jornada de Sana Distancia.
Por su parte, Antonio, de 65 años, mencionó que en la Romero Vargas, donde habita, las personas continúan saliendo “como si no pasará nada”, mientras solo unos pocos lo hacen utilizando cubrebocas.
Sobre esto, consideró que los colonos deberían ser más prudentes, ya que resguardarse en sus hogares facilitará la recuperación de actividades “crean o no” en el virus.
Medidas de prevención debieron ser más “fuertes”
Martha vio “benéfica” la decisión del gobernador Miguel Barbosa Huerta; no obstante, criticó que las restricciones en mercados para evitar las aglomeraciones debieron implementarse al inicio, pues se trató de una respuesta “tardía”.
Asimismo, consideró que la afluencia en los mercados Hidalgo, Morelos e Independencia, así como en la Central de Abasto, es responsabilidad del ayuntamiento.
Con respecto al regreso a clases, la también profesora mencionó que en materia de salud fue una buena decisión, mientras que, del lado de la enseñanza, fue “desfavorable”, debido a que resulta “complicado” impartir clases en línea.
Explicó que no a todos los alumnos se les facilita trabajar en línea por falta de acceso a internet, además de que, señaló, resulta más agotador para estudiantes y docentes, aunado a que no terminan de acostumbrarse.