Luego de que el periódico Reforma denunciara una amenaza de bomba por parte de un presunto integrante de Cártel de Sinaloa, el presidente Andrés Manuel López Obrador condenó el hecho y deslindó a su gobierno, mientras que la Segob puso a disposición su mecanismo de protección a periodistas.
Este jueves por la mañana, Reforma publicó en sus redes sociales que, tras publicar un video titulado “Del no pasa nada a la emergencia”, donde criticó el discurso del presidente sobre la pandemia de Covid-19, un hombre que dijo ser el “diputado federal Lozoya” llamó a sus oficinas para reclamar que el diario “ya sobrepasó la línea” y amenazó con “volar” el edificio “si no corrige”.
Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador manifestó que “nosotros descalificamos cualquier acto violento, somos pacifistas, nadie será censurado (…) se garantizan libertades plenas, el derecho a disentir y condenamos cualquier amenaza que se haga hasta en nuestro nombre”.
Posteriormente, la junta de Gobierno del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas externó, a través de un comunicado, su condena y rechazo a las amenazas dirigidas a dicho medio de comunicación.
Recordó que, que de acuerdo al artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y 6 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se reconoce la obligación del Estados para garantizar que el ejercicio periodístico se desarrolle libremente, sin ninguna clase de presión o riesgo que obstaculice su ejercicio legítimo.
Por lo anterior, este mecanismo “se comunicó y puso a disposición del periódico Reforma, las medidas de seguridad que pudieran ser necesarias”.
