Labora personal de vigilancia y aseo de BUAP sin protección por Covid, acusan
Labora personal de vigilancia y aseo de BUAP sin protección por Covid, acusan. Foto: EsImagen / Archivo
Labora personal de vigilancia y aseo de BUAP sin protección por Covid, acusan
Labora personal de vigilancia y aseo de BUAP sin protección por Covid, acusan. Foto: EsImagen / Archivo

Personal de vigilancia y limpieza de la BUAP acusó continúan trabajando, pero sin cubrebocas, guantes ni gel antibacterial, aumentando su probabilidad de contagiarse del Covid-19, ya que obligan a laborar a aquellos que son adversos al manejo de la institución.

Así lo indico un trabajador que prefirió el anonimato, al señalar que pese a que la universidad emitió un decreto donde se anulaban la actividades, este se circunscribía principalmente a profesores, alumnos y a algunos administrativos.

El tercer apartado de dicho texto refiere que “el personal académico y/o administrativo que considere indispensable su asistencia a las instalaciones” deberá enviar un correo a la Comisión Institucional para el Seguimiento y Evaluación del Covid-19, también conocido como “coronavirus”.

Con esto, se entiende que sólo aquellos cuya función sea necesaria para el mantenimiento de la institución deberán seguir laborando; no obstante, la fuente consultada aseguró que tanto al personal de la DASU como de limpieza no les brindan cubrebocas, ni guantes o gel antibacterial que disminuya el riesgo de enfermarse.

“Queda claroque para el señor rector (Alfonso Esparza Ortiz) los trabajadores administrativos no somos importantes: no representamos a la comunidad, a la institución. Para él, la BUAP son los catedráticos y los estudiantes”, expresó.

Mencionó que la designación del personal de vigilancia recae en la coordinación de la DASU, desde la que, acusó, eligen a los trabajadores que son adversos a la actual administración para cumplir con las jornadas de 24×12, mientras que al resto los descansan.

“Hay gente que estamos en contra de algunas situaciones, tanto administrativas como de laborales, y desde ahí se encajan”, comentó.

Vigilantes, con miedo a contagiarse

Al respecto, indicó que algunos vigilantes externaron su miedo de adquirir el virus que ya se encuentra en la Fase 2, ante lo cual, mencionó que el coordinador les ha dicho que deben acudir obligatoriamente a las instalaciones ya que el “coronavirus no les afecta porque están dentro de su área”.

Esto, pese a precisar que en consecuencia a la falta de alumnos y actividades, hay zonas que no requieren de tanta vigilancia, por lo que los trabajadores podrían turnarse, pero hay “compañeros que cuidan en balde” porque no hay movimiento.

Precisó que en situaciones como esta, el Sindicato Independiente de Trabajadores de la BUAP (Sitbuap) no puede apoyarlos ya que su líder, Hugo Hernández García, sigue sin tener la toma de nota por irregularidades que hubo durante sus elecciones, lo cual no ha evitado que siga cobrando cuotas y afirme representarlos.

Esparza debería hacerse responsable de contagios, señalan

A estas preocupaciones se sumaron las de otros trabajadores de la Dirección de Apoyo y Seguridad Universitaria (DASU), pues a través de mensajes de Whatsapp exteriorizaron que se encuentran laborando en su horario normal “pese a estar expuestos a contagios de este virus”.

Expresaron que si algún compañero se enferma, la administración Esparza Ortiz debería pagar “todo lo que conlleva la enfermedad a nosotros y a nuestras familias, porque también estaríamos exponiendo a nuestros familiares, ya que la BUAP y el sindicato no están cumpliendo con las medidas y normas de higiene”.

Señalaron que incluso hay vigilantes con enfermedades crónico-degenerativas que continúan laborando, mientras que ellos no han sido los únicos afectados, pues incluso la máxima casa de estudios abandonó a sus alumnos paristas y los responsabilizó de algún contagio entre ellos.

Por lo tanto, los inconformes entregarán un oficio a las autoridades universitarias, donde explicarán a lo que están expuestos, para así evitar que la institución se deslinde de responsabilidades ante algún posible contagio, pues “somos el sustento de nuestras familias y no tiene porqué arriesgarnos de esa forma”.