Rosa María Orradre Monteol, derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sobrevive desde hace 20 años al cáncer de mama, quien se define con las palabras volver a nacer, salvar la vida, expresar gratitud e irradiar felicidad.
Fue en 1999 cuando le diagnosticaron la tumoración en el Hospital General Regional número 72 de Tlalnepantla, Estado México y desde entonces acude puntual a sus chequeos médicos.
La atención oportuna que recibió en ese nosocomio y luego en el Hospital de Oncología del CMN Siglo XXI para continuar el tratamiento, que consistió en 28 sesiones de radioterapia y seis de quimioterapia, fueron de gran ayuda, pues el problema no ha regresado y el próximo febrero cumplirá 21 años libre de esa enfermedad.
Rosa María nunca se ha dejado de checar por lo que pide a quienes empiezan el tratamiento a tener energía para iniciarlo y aferrarse a la vida para salir adelante.
Radioterapia, pilar en atención contra el cáncer
Por su parte, el jefe del servicio de radioterapia del Hospital de Oncología del CMN Siglo XXI, Jesús Armando Félix Leyva, explicó que la radioterapia es un procedimiento que se utiliza de manera curativa, radical, complementaria o post operatoria y de manera paliativa que es un pilar para la atención contra el cáncer y en ciertos tumores benignos.
Detalló que en dicha unidad médica se tratan diariamente 600 pacientes, mientras que a nivel nacional, de acuerdo con el número de equipos que tiene el instituto, se atienden alrededor de 200 mil sesiones anuales.
Actualmente, el IMSS tiene un equipo de radiocirugía robótica (CyberKnife), equipo de alta tecnología, con exactitud y precisión submilimétricas, útil en el tratamiento de enfermedades benignas (meningiomas, adenomas de hipófisis, malformaciones arteriovenosas, entre otras) y malignas (oligometástasis, cáncer de próstata, cáncer de hígado).
Por su parte, el doctor Félix Leyva, del Seguro Social, refirió que alrededor del 50 por ciento o más de pacientes, van a requerir radioterapia en cualquier etapa de la enfermedad neoplásica, como parte del manejo local junto con la cirugía.
Los tratamientos convencionales de radioterapia tienen una duración desde cinco a 10 minutos y los de mayor complejidad desde 20 hasta 40 minutos.
