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La renuncia de Heliodoro Luna exhibe la falta de obras y proyectos del gobierno barbosista

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que en medio de una grave crisis por la parálisis que vive la administración pública por la cancelación de licitaciones y obras iniciadas en la gestión interina de Guillermo Pacheco Pulido, y la incapacidad de las actuales autoridades para gestionar y bajar recursos adicionales del gobierno federal o conseguir que en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020 se etiqueten fondos para obras relevantes o de alto impacto, este lunes se confirmará la renuncia de Heliodoro Luna Vite como secretario de Infraestructura del gobierno del estado.

Heliodoro, que era de los colaboradores más cercanos de Barbosa, pues venía de trabajar con él desde la Cámara de Diputados, es el cuarto secretario en dejar el gabinete en un gobierno que apenas el viernes pasado cumplió 100 días.

Su renuncia es una mala noticia, aun cuando Heliodoro Luna no haya arrancado o inaugurado una sola obra importante, ya que su salida confirmará lo que muchos suponemos: que el gobierno de la llamada Cuarta Transformación está más ocupado en venganzas políticas que en impulsar el crecimiento y desarrollo que el estado demanda.

Pero también que el gabinete contratado por el gobernador Barbosa para dar resultados, corregir los excesos y abusos del pasado, y mejorar la eficiencia y eficacia del gobierno en distintos frentes, se está quedando corto o muy lejos de superar lo realizado por las administraciones que lo antecedieron, al menos en el comienzo o sus cien primeros días.

El gobernador Barbosa optó por designar como secretarios de despacho a personajes que no conocía o con los cuales jamás había trabajado, pero que supuestamente eran honestos y técnicamente preparados. En aras de eso se justificó su desarraigo u oriundez local. También se dijo que tenían buenas relaciones o venían bien recomendados por el presidente López Obrador, su esposa o hijos, o que serían un buen enlace con los secretarios del gobierno federal y que esa circunstancia ayudaría a la administración barbosista a gestionar recursos extraordinarios o proyectos, programas y obras de gran calado social.

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De ausencias panistas y comidas partidistas con la IP

Jorge Rodríguez en su columna A Puerta Cerrada, publicada en El Sol de Puebla, indica que entre algunos de los asistentes al festejo panista que se realizó el viernes en el salón social JP corrió la interrogante acerca del paradero del ex presidente municipal de Puebla y ex gobernador de apenas 22 meses José Antonio Gali Fayad.

Gali, en efecto, no se afilió al PAN, pero abanderó a este partido político y otros más en las coaliciones que lo condujeron al triunfo en las contiendas electorales de 2013 y 2016, por lo que uno que otro militante panista se preguntó qué pasará con él dentro de este proceso de aparente reunificación con que el albiazul pretende llegar fortalecido a los próximos comicios.

El otrora secretario de Infraestructura terminó la minigubernatura entrampado en severas diferencias con Rafael Moreno Valle y Martha Erika Alonso Hidalgo que lo alejaron del PAN, pero ahora que el partido ha dejado de estar en poder de esa pareja, por las razones que usted ya conoce, puede ser momento para sumarlo de nuevo al equipo, en este contexto de renovada unidad.

Se sabe que Gali Fayad se quedó con las ganas de continuar en el servicio público y que mantiene vigentes sus aspiraciones para volver a competir por un cargo de elección popular, lo que podría ocurrir en 2021, cuando estarán en disputa, además de la muy cotizada presidencia municipal de Puebla, diputaciones federales y locales.

En una de esas se va a tocar la puerta del dirigente nacional panista, Marko Cortés Mendoza, o voltea hacia otro partido político.

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Congresos sumisos, instituciones débiles

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que en la semana que concluyó tanto Puebla como la federación renovaron a los titulares de sus instituciones, que en teoría, están encargadas de velar por los Derechos Humanos. Los relevos, en ambos gobiernos, se dieron entre opacidad, señalamientos y hasta con impugnaciones legales que podrían concluir con tirar los nombramientos.

Al parecer la famosa frase de Andrés Manuel de “Al diablo las instituciones” dejó de ser anecdótica y se convirtió en una realidad.

No lo digo sólo por el caso del INE, donde se pretende impulsar una reforma para debilitar al Instituto Nacional Electoral y retirar a su consejero presidente Lorenzo Córdova; lo señalo también por el caso de la Suprema Corte y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

En el senado de la República no importó que Rosario Piedra incumpliera con el requisito legal de mayoría calificada. Los videos que ponen en duda cuántos votos realmente se emitieron a favor de ella tampoco mermaron la designación y menos que fuera candidata por Morena en las elecciones pasadas.

Piedra Ibarra se alzó con el nombramiento. Los senadores morenistas –y sus aliados- avalaron su llegada a la CNDH pese al cúmulo de irregularidades que la oposición denunció, todo para complacer al titular del Ejecutivo quien horas antes, en su acostumbrada “mañanera” tiró línea y se pronunció a favor de que una activista ocupara el cargo.

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En el juicio del PAN, ¿a quién harán caso los magistrados, a Gobernación o al Ejecutivo?

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que la primera prueba de fuego que tendrán los actuales magistrados del Tribunal Estatal Electoral de Puebla (TEEP), luego del convulso periodo de 2017 a 2019, es la forma en que van a solucionar la impugnación que se presentó contra la elección de dirigentes del Comité Municipal del PAN en la capital. Este caso servirá para probar si los togados por fin van a actuar con imparcialidad o si serán influidos por algún sector de Morena, sobre todo el que busca incidir en este asunto para controlar al panismo poblano.

Dicho cuestionamiento surge por la dinámica de acusaciones y especulaciones que hay entre los dos bloques dominantes del PAN en la capital –que son representados por Jesús Zaldívar Benavides y Eduardo Alcántara Montiel–, que se han manifestado de la siguiente manera:

Luego de que el pasado 29 de octubre la Comisión de Justicia del Comité Ejecutivo Nacional del PAN falló a favor de Jesús Zaldívar para que ocupe la presidencia del PAN de la Angelópolis, el bando contrario, el que había impugnado el resultado oficial de la asamblea municipal de albiazul del día 25 de agosto, ha dicho que siente mucha seguridad que dicha resolución será derribada en el TEEP, en donde Eduardo Alcántara Montiel ya presentó un recurso de impugnación.

Esa confianza, dice los panistas de uno y de otro bando, se debería a que el titular de la Secretaría de Gobernación, Fernando Manzanilla Prieto, dice tener la suficiente influencia para conseguir que los magistrados, encabezados por Jesús Gerardo Saravia Rivera, fallen a favor de Eduardo Alcántara.

Que ese fallo sería parte de un plan que tendría Manzanilla de controlar a una importante facción del PAN para que le ayude a concretar sus propios proyectos políticoelectorales de cara a los comicios intermedios de 2021, en donde algunos ven el titular de Gobernación como posible candidato a edil de la capital o a diputado local, para luego ser líder del Congreso del estado.

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#LadyISSSTE en Puebla

Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que Guadalupe Furlong se despacha con la cuchara grande de la 4T, como subdelegada del ISSSTE en Puebla.

Rémora del sexenio de Enrique Peña Nieto, ahora con Andrés Manuel López recurre al orgullo de su nepotismo hasta convertir al ISSSTE en una empresa familiar.

¿Y el superdelegado Rodrigo Abdala?

Ya saben. Ni por enterado.

La subdelegada Furlong se pitorrea de la Cuarta Transformación sin que nadie lo pueda remediar.

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Criminalizar a las víctimas

Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que cuando asesinaron a José Luis Tehuatlie Tamayo, el gobierno del estado hizo todo lo posible por desprestigiarlo ante la opinión pública, en un intento desesperado por salvar en algo la dignidad e imagen.

Inventaron teorías increíbles, recurrieron a la manipulación de pruebas, a la tergiversación descarada de la verdad, con tal de encubrir a los policías estatales responsables de su muerte.

No tuvieron empacho en recurrir al Photoshop para inventarse imágenes en donde el niño indígena aparecía sosteniendo una manta de protesta –como si eso fuera suficiente para justificar su asesinato- cuando en realidad se encontraba jugando en un predio aledaño al lugar en donde se llevaba a cabo el bloqueo de la autopista a Atlixco.

Arremetieron también contra su madre, doña Elia Tamayo, que en ese momento vivía sus horas más oscuras; el peor infierno que cualquier ser humano puede vivir.

Cuestionaron su papel como progenitora, su nivel de amor, cariño y responsabilidad para con su hijo.

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Te lo digo Patjane para que lo escuchen los ediles de Morena

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada Diario Cambio, señala que después de que Barbosa ganó la gubernatura y puso fin a meses de inestabilidad política, comenzaron a correr las apuestas de quién sería el primer alcalde en caer para poner orden entre los infames presidentes municipales emanados de Morena que se convirtieron en un lastre para la marca. Todas las apuestas ponían en primer lugar como candidata al patíbulo a Claudia Rivera Vivanco, la impopular alcaldesa de Puebla capital.

Sin embargo, nadie sospechaba que la iban a rebasar por la derecha para ser desplazada en las apuestas de la defenestración. Y que el primer candidato a la destitución ya no sería ella sino el enamoradizo Felipe Patjane, cuyo estatus de desaparecido en cualquier momento podrá transformarse en prófugo de la justicia.

A esta hora sobran razones para meterlo a la cárcel, pues se documentó plenamente el abuso del erario tehuacanero. La Fiscalía General del Estado ya judicializó una primera carpeta de investigación y en cualquier momento el Poder Judicial emitirá una orden de aprehensión. Ya no se salva ni aunque lo reciba Ricardo Monreal.

En el Senado le dieron portazo, por lo que ayer miércoles regresó a Puebla con la cola entre las patas buscando al gobernador Barbosa para implorar clemencia.

Fue recibido por funcionarios de la SGG que le hicieron un planteamiento muy claro: su mal gobierno lo había llevado a perder el control de su cabildo, por lo que eran los mismos regidores quienes solicitaban su destitución. El primer problema lo tenía ahí, no en Casa Aguayo.

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Juárez y López Obrador: Vidas Paralelas

Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, indica que el 2 de octubre pasado participé en un foro iberoamericano-ruso en la Universidad Estatal de San Petersburgo.

En unas semanas más saldrá publicada la memoria de dicho foro, en el que participaron académicos y especialistas de varias partes del mundo.

He aquí la ponencia que presenté.

Benito Juárez y Andrés Manuel López Obrador son dos personaje de novela rusa.

En ellos cabe redonda y perfecta la frase de Viktor Frankl: “Cualquiera puede sobrevivir al sufrimiento si le encuentra sentido a su vida”.

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