La CNDH emitió dos recomendaciones en 2016 para hospitales en los municipios poblanos de Cuetzalan y Pahuatlán del Valle, por la mala atención a mujeres indígenas embarazadas, lo que resultó en la muerte de una recién nacida y en otro caso, falleció la madre.
De acuerdo con el documento “Estudios sobre el cumplimiento e impacto de las recomendaciones generales, informes especiales y pronunciamientos de la CNDH 2001-2017 Derecho a la protección de la salud”, se señaló que además de Puebla, Guerrero, Oaxaca, Chiapas y Veracruz tienen una elevada mortalidad de mujeres embarazadas, por lo que se exhortó a estas regiones a seguir el ejemplo de comunidades donde estos decesos se han disminuido como fue el caso de El Nayar, en el estado de Nayarit.
Según el informe entre 2001 y 2017, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) realizó quince recomendaciones por violaciones a la protección de la salud de mujeres indígenas a nivel nacional, una de ellas fue la 54/2016 sobre un caso ocurrido en 2014, cuando una joven de 21 años y embarazada señaló que en el Hospital General de Cuetzalan no se le prestó atención médica oportuna a pesar de que presentaba dolores de parto, sino que la mandaron a casa y así estuvo mucho tiempo sin ser atendida lo que derivó en la muerte de su hija horas después de su nacimiento.
La otra recomendación consta con el folio 58/2016 y trata sobre el hecho ocurrido en septiembre de 2015, cuando una mujer indígena náhuatl de 21 años de edad, originaria de Zacapehuaya, acudió al Hospital Integral de Pahuatlán de Valle, ya que su bebé estaba por nacer, sin embargo no la atendieron al no contar con ginecólogo, anestesiólogo ni pediatra, por lo que fue llevada al Hospital General de Tulancingo en el estado de Hidalgo, donde debido a la inadecuada atención obstétrica por parte del personal médico hubo complicaciones que resultaron en la muerte de la paciente.
En 2016, se hacen 2 recomendaciones a Puebla
Estas dos recomendaciones fueron realizadas al entonces gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle y la segunda también fue dirigida al todavía mandatario de Hidalgo, Omar Fayad Meneses.
Respecto al caso en Cuetzalan, la CNDH solicitó que haya una compensación y rehabilitación para la madre que perdió a su bebé, así como que se otorgue el seguimiento y atención psicológica, además de que en las clínicas, hospitales y centros de salud de la jurisdicción sanitaria de Zacapoaxtla se impartieran dos cursos de educación y capacitación que garantice el trato digno a mujeres y niños.
En el caso de Pahuatlán de Valle se le pidió que su hospital integral cuente con el personal capacitado y suficiente para atender las urgencias obstétricas, mientras que a las autoridades de Hidalgo los exhortó a reparar el daño en que incurrió el personal médico y a que se participe eficazmente en las investigaciones tras la presunta negligencia médica.
La CNDH indicó en su informe que la violencia obstétrica es uno de los temas sensibles en la prestación de los servicios de salud, este concepto identifica el tipo de violencia hacia las mujeres en el contexto de la reproducción humana, otros de los tópicos que le preocupan son la atención a la salud en hospitales psiquiátricos y la protección a la salud de las mujeres indígenas.
Cabe mencionar que de acuerdo con datos la Dirección General de Epidemiología (DGE) a inicios de 2019 y hasta el 24 de agosto, se tuvo el registro de 21 muertes maternas en la entidad, el 47.6 por ciento ocurrieron en nosocomios de la Secretaría de Salud (SS) estatal.